Hay riesgo de que se registre en el país una hambruna de no atenderse la pobreza alimentaria de 22 millones de mexicanos, de los cuales algunos sólo comen una vez al día, advirtió el presidente de la Central Campesina Independiente, Rafael Galindo Jaime, quien demandó al gobierno federal modificar las políticas públicas hacia el sector agropecuario con la finalidad de atender la pobreza alimentaria y multidimensional que se concentra en Chiapas, Oaxaca, Tlaxcala, Guerrero, Puebla y Distrito Federal.

La estrategia que planteó contempla potenciar la productividad de más de 4 millones de productores agrícolas rezagados por falta de apoyos económicos y de estímulos. Indicó que debido a las heladas en el norte del país, y a pesar de que la resiembra se llevó a cabo en más de 360 mil hectáreas, habrá una caída de la producción en más de 40 por ciento, lo que significa que de los cinco millones de toneladas de maíz que se esperaban sólo se obtendrán tres.

El ciclo otoño-invierno reportará un déficit de dos millones de toneladas de maíz, por lo que habrá importaciones a precios superiores a 250 dólares por tonelada y tendrá que recurrirse al mercado estadunidense. Por ello, consideró que deben extender los beneficios económicos otorgados a productores de Sinaloa, Sonora y Tamaulipas hacia entidades del sur que inician el ciclo agrícola primavera-verano a fin de incrementar la producción.