Guanajuato, Gto., 19 de marzo. Es ilegal que la policía de León arreste y lesione a los indígenas que venden semillas, dulces y flores en cruceros y estaciones de camiones, pues vulneran sus derechos humanos, afirmó Gerardo Trujillo Flores, coordinador de la fracción parlamentaria local del PAN.

Hay que cuidar el trato que se da a las personas que ejercen el comercio en la calle. Creo que es ilegal el trato que se les da y que se les levante de esa forma, apuntó.

Con la nueva Ley Indígena que aprobó el Congreso local, el gobierno de León debe proteger y propiciar el desarrollo de los pueblos étnicos de México asentados en el municipio, dijo el presidente de la Junta de Coordinación Política del Poder Legislativo.

No debe haber maltrato o discriminación sólo por que son indígenas. El municipio deberá crear políticas públicas para protegerlos, señaló.

La administración de León aplica el operativo Crucero Seguro para retirar de las grandes avenidas a indígenas y comerciantes ambulantes, también se les prohíbe vender dulces en las estaciones de transferencia del Sistema Integrado de Transporte.

El presidente municipal de León, el panista Ricardo Sheffield, afirmó que cuando los otomíes y comerciantes no entienden que vender en espacios públicos es ilegal y además se ponen flamencos, pues tienen que ser arrestados.

Recientemente, la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guanajuato emitió dos recomendaciones al presidente municipal porque un inspector de comercio y una policía vulneraron los derechos de la otomí Magdalena de la Cruz, quien fue arrestada y lesionada por vender flores en la calle.

El ombudsman Gustavo Rodríguez recomendó que sean sancionados el inspector de la Dirección de Comercio y Consumo, Álvaro Delgado Hora y la policía Yolanda Monreal Rodríguez. La otomí fue detenida, según dijeron funcionarios, por afectar el bienestar colectivo, la seguridad y tranquilidad de las personas.

Mientras, el dirigente estatal del PAN, Fernando Torres Graciano, consideró que no es correcto que el gobierno de León use la fuerza pública contra los otomíes que venden en sitios públicos.

No, no es por ahí, el mecanismo del uso de la fuerza, pues además (los indígenas) se encuentran en un estado de vulnerabilidad, sostuvo; consideró que Derechos Humanos debe ser proactiva y promover políticas públicas para evitar la discriminación y el abuso antes de que se generen las quejas.