La renuncia de los magistrados Catalina Ochoa, Rafael Boudib y Nezahualcóyotl Zúñiga, encargados de juzgar el asesinato de Rubí Frayre Escobedo, perpetúa las condiciones de impunidad que prevalecen en el país, porque al no ostentar el cargo ya no son sujetos de juicio político, afirmaron activistas de los derechos de las mujeres.

Aunque la liberación del asesino confeso, Rafael Barraza, no sólo fue responsabilidad de dichos funcionarios, al evadir el proceso judicial hacen que continúe la opacidad sobre su trabajo y siguen reproduciendo esquemas culturales misóginos, añadieron.

María de la Luz Estrada, integrante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, consideró que con esas renuncias, el Poder Judicial sigue intacto, no se le puede cuestionar sobre la forma en que llevan los casos y de esa forma continúa la impunidad.

Si bien no todos los errores en el proceso son atribuibles a dichos magistrados, con esta especie de evasión de la justicia seguimos con las cadenas de deficiencia del anterior sistema inquisitorio. Los errores del Ministerio Público no los exonera de su obligación de haber hecho mucho más en este caso y en otros de homicidios de mujeres, dijo.

Con respeto a la autonomía del Poder Judicial, es necesario visibilizar y sancionar lo que los magistrados que hagan mal su labor. Hay que erradicar sus fallas, como el hecho de reproducir una mentalidad de desprecio hacia las mujeres, insistió.

Alma Gómez, coordinadora del área de educación del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres, señaló que el haber dejado su cargo no exenta a dichos magistrados de la posibilidad de un juicio político, y afirmó que su renuncia podría obedecer a una negociación con otros actores de la entidad para tranquilizar la polémica.

El juicio contra ellos ya significaría una especie de sentencia, y hubieran podido inhabilitarlos para ejercer cargos públicos. Así que renuncian de una vez para evitarlo, pero hasta el momento todo eso son especulaciones, admitió.

Los asuntos de Rubí Frayre y la dimisión de los jueces están relacionados, pero hay diferencias importantes que se deben valorar para su mejor entendimiento, afirmó.