Programas de divulgación y difusión del conocimiento son herramientas indispensables para atacar la ignorancia generada por las fallas estructurales del sistema educativo mexicano, indicó la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).

El organismo sostuvo que con éstas se puede combatir la inopia científica exhibida recientemente en la más reciente (2009) Encuesta sobre Percepción Pública de la Ciencia y la Tecnología en México –realizada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía–, que reflejó que casi 84 por ciento de los mexicanos confían demasiado en la fe y poco o nada en la ciencia.

Los datos del estudio –dados a conocer a principios de este año– indicaron además que más de la mitad de los encuestados (57.5 por ciento) considera que, debido a sus conocimientos, los científicos tienen un poder que los hacer peligrosos para el país.

Otros indicadores de la encuesta mostraron que muchos mexicanos confían en las limpias, creen en los números de la suerte y consideran que algunas personas tienen poderes síquicos.

Al respecto, miembros de la AMC han lamentado en reiteradas ocasiones que los ciudadanos crean más en la suerte o la religión que en hechos científicos.

La AMC resaltó que desde hace más de 50 años toma acciones concretas para difundir el conocimiento. En un comunicado, el organismo informó que uno de esos programas es Domingos en la Ciencia, que desde hace 28 años tiene por objetivo difundir, de manera divertida y amena, temas científicos entre la niñez y la juventud de nuestro país.

En estas casi tres décadas, la AMC ha impartido más de 7 mil conferencias en 16 diferentes áreas. Todas ellas encaminadas a que niños y jóvenes puedan vivir una experiencia relacionada con el desarrollo científico.

Se trata de uno de los programas pioneros de la AMC que actualmente se realiza en 29 sedes en la República, mediante la difusión de la cultura, sobre todo niños, quienes interactúan con investigadores que transmiten de manera divertida el conocimiento que requiere el país.