Revela el Inegi cambios demográficos en la capital: solteros ya superan a casados
Reporta los más elevados índices de bienestar del país, pese a la aglomeración
Martes 8 de marzo de 2011, p. 33
Con una desigual distribución espacial de sus habitantes, el Distrito Federal alberga en su territorio a 5 mil 920 personas por kilómetro cuadrado en promedio, densidad demográfica ocho veces superior a la del estado de México, la entidad más poblada del país, informó José Luis Bonilla Mávil, director regional centro del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
No hay en el país un estado que se le acerque ni remotamente al DF en materia de concentración de habitantes.
En Morelos, la densidad es de 364 personas por kilómetro cuadrado, en el estado de México se eleva a 679 y en Aguascalientes, otra de las entidades pequeñas, llega a 211 personas. En el país la relación es de 57.3 habitantes por cada uno de sus más de 2 millones de kilómetros cuadrados.
Pero en el Distrito Federal –con una extensión que representa 0.07 por ciento del territorio nacional– parece que apenas caben sus 8 millones 851 mil 80 habitantes, sus 2 millones 744 mil 441 viviendas y más de un millón 153 mil automóviles.
Entre la congestión vial y las obras para evitar el colapso
, la densidad demográfica alcanza casi una dimensión de hacinamiento en las demarcaciones de Iztacalco, Cuauhtémoc e Iztapalapa. En cada una de estas tres delegaciones habitan más de 16 mil personas por kilómetro cuadrado.
Según los resultados definitivos del censo, ninguna otra entidad del país presenta los elevados índices de bienestar de la ciudad de México: la mitad de su población tiene 31 años o menos de edad; el promedio de escolaridad de las personas de 15 años y más llega a segundo grado de secundaria, y 63.8 por ciento de sus habitantes declaró ser derechohabiente de algún servicio de salud.
En la capital del país 97.8 por ciento de las viviendas tiene piso de cemento o de mosaico, 99 por ciento cuenta con energía eléctrica, 97.8 por ciento dispone de agua entubada y 99 por ciento cuenta con servicio de drenaje.
En cuanto al equipamiento de las viviendas, precisó el Inegi, 98 por ciento tiene televisor, 90.8 por ciento cuenta con refrigerador, en 91.6 por ciento hay radio, en 47 de cada 100 hay automóvil –un millón 153 vehículos que mantienen congestionadas las principales vialidades–, en 49.1 por ciento hay computadora y 39.2 por ciento está conectada a Internet.
En los pasados cinco años 732 mil 742 personas emigraron de esta urbe, pero 239 mil 125 individuos establecieron su residencia en el Distrito Federal durante el mismo periodo. Así, la pérdida neta de habitantes por migración entre 2005 y 2010 fue de 498 mil 617. Pero no se fueron muy lejos; 51.8 por ciento vive ahora en la zona conurbada del estado de México.
Como ha ocurrido en todo el país, en el DF la religión católica ha perdido feligreses. En 1990 el credo católico contaba con 92.4 por ciento de los creyentes y en 2010 bajó a 84.4 por ciento; mientras, las creencias evangélicas y protestantes elevaron su participación de 3.1 a 5.5 por ciento. En el mismo periodo, la población citadina que manifestó no tener religión pasó de 2.2 a 5.5 por ciento.
El estado civil de los habitantes del Distrito Federal también ha cambiado. A diferencia de los censos de 1990 y 2000, en que predominaba la población casada, en 2010 la mayor proporción la tuvo la población soltera, con 37.5 por ciento. La casada bajó a 35.5 por ciento; las personas en unión libre duplicaron su participación, de 6.3 por ciento en 1990 a 14.2 por ciento en 2010, y la gente separada la triplicó, de 1.6 a 4.8 por ciento.