Para qué demeritar... Óscar (Pérez) hizo su trabajo a plenitud y nos impidió la victoria, reconoció Enrique Ojitos Meza tras el empate sin goles ante el Necaxa, para enseguida lamentar: Dejamos ir dos puntos y quedamos con una sensación de vacío muy grande.

Tras el partido correspondiente a la fecha nueve del campeonato, La Máquina llegó a 15 puntos, mientras los Rayos suman 11 unidades. El timonel Sergio Bueno admitió que fue un partido sufrido, pero quedó contento al conocer la derrota de los Gallos –su rival en la lucha por no descender– en Monterrey, lo que nos va convenciendo de que ganaremos la salvación.

Los guardametas Jesús Corona y Óscar Conejo Pérez fueron lo más destacado en un primer tiempo en el que Cementeros y Rayos desperdiciaron un magnífico escenario: una de las mejores entradas del torneo en el estadio Azul, con ligero predominio de playeras rojiblancas que con frecuencia impusieron el grito de ¡Rayos, Rayos!

Después del disparo de Sergio Chapita Blanco, al minuto cinco, un sorpresivo trallazo que permitió lucir al máximo a Chuy Corona con excelente desvío hacia arriba, no hubo más de un Necaxa que se ocupó con prioridad en neutralizar a los locales.

El cuadro celeste tampoco vivía su mejor tarde, durante varios minutos fue encajonado en su propio reducto, situación que hizo levantarse del banquillo a un malencarado Meza, por lo que no tardó la reacción de sus dirigidos.

El extremo Javier Aquino, hasta entonces intermitente, cedió gran pase a Christian Giménez; sin embargo, Conejo Pérez estaba atento y en plan estelar achicó perfecto ante la embestida del argentino.

El regaño en el vestidor de La Máquina debió haber sido severo, porque los Cementeros regresaron al campo con máxima determinación y enseguida tocaron la puerta defendida por Pérez; no obstante, el disparo de César Villaluz se fue por encima.

Falla increíble

Los de Aguascalientes tuvieron una inmejorable opción al minuto 55, pero el uruguayo Darío Gandín, quien entró en lugar de Sergio Blanco, falló de manera increíble ante marco abierto. Cruz Azul, en el contragolpe, tampoco pudo dar vida al tablero ante la acción salvadora del Tilón Chávez.

El mundialista Óscar Pérez parecía reditar sus viejas glorias en este escenario: fue un imbatible guardián que inhibió a Villa, Giménez y compañía. Villaluz, al minuto 73, estrelló el esférico en el poste derecho después que los Rayos se quedaron con un hombre menos tras la expulsión de Juan Carlos Silva por dura entrada sobre Waldo Ponce.

Meza, quien había apuntalado su ofensiva con la entrada de Alejandro Castro, mandó al ataque a Javier Chuletita Orozco, pero una vez más los azules fueron incapaces de aprovechar su superioridad numérica.

El estratega Bueno resaltó que desde su arribo al timón el equipo rojiblanco marcha invicto, pero todavía no canta victoria: No quiero ni hacer cuentas, ya veremos luego el balance final.