La Paz, 19 de febrero. El presidente de Bolivia, Evo Morales, pidió hoy a la directiva sindical del país volver a la mesa de negociaciones, con el propósito de alcanzar un acuerdo sobre los nuevos parámetros salariales y así frenar varias protestas convocadas para la semana próxima.

En un encuentro con sus seguidores en la ciudad de Cochabamba (centro del país), el mandatario anunció que el lunes a primera hora su ministro a cargo de los asuntos de la Presidencia, Óscar Coca, además de los titulares de Trabajo, Félix Rojas, y de Economía, Luis Arce, aguardará a la directiva de la Central Obrera Boliviana (COB).

El gobierno siempre está abierto al diálogo, los ministros tienen la obligación de atender, afirmó Morales. Anticipó un debate numérico sobre la realidad del país con la directiva de la COB, que ha pedido elevar el salario mínimo de 80 dólares a 510.

Les he pedido a los ministros que demuestren que esta es la plata que tenemos, cómo hay que distribuir y que aquí no ocultamos nada, puntualizó el gobernante, quien además pidió a los líderes sindicales del país mayor responsabilidad.

El gobierno de Morales enfrenta la peor ola de protestas desde que juró por vez primera a la presidencia del país. Entre el martes y viernes de la semana pasada cientos de trabajadores se sumaron a las movilizaciones convocadas por la COB.

Las protestas, que podrían reanudarse la próxima semana en varias ciudades del país, fueron también una respuesta de varios sectores en contra del incremento a las tarifas del transporte urbano.

La directiva de la COB, a cargo del minero Pedro Montes, aún no ha respondido a la invitación del gobierno a retornar a las negociaciones y se espera que este domingo se conozca una repuesta al término de una evaluación del sector.