Oaxaca, Oax., 12 de febrero. El Congreso local analizará la legalidad del proyecto hidroeléctrico en la presa Cerro de Oro, a cargo de las empresas Comex Hidro y Electricidad de Oriente, con una inversión de 60 millones de dólares, informaron integrantes de la comisión de diputados que el viernes visitó los ejidos Los Reyes, Santa Úrsula y Paso Canoa, en el municipio de Tuxtepec, donde se realiza el proyecto.

La postura de los legisladores está dividida. Flavio Sosa Villavicencio, del Partido del Trabajo, y Margarita García, de Convergencia, consideraron que se debe exigir parar las obras, que comenzaron a principios de 2010.

Joel Isidro Inocente y Luis de Guadalupe, del PAN, dijeron que el Congreso debe llamar al delegado de la Semarnat, Esteban Ortiz Rodea, y al titular del Instituto de Ecología del estado, José Francisco Félix, para que informen del procedimiento legal seguido por las empresas para iniciar los trabajos.

Isidro Inocente acusó a algunos compañeros de haber viajado a Tuxtepec para hacer campaña, y se pronunció por llamar a los funcionarios de las dependencias encargadas de otorgar los permisos de construcción y luego elaborar un punto de acuerdo en el que el Congreso local pida parar las obras o continuarlas.

Luis de Guadalupe opinó que las decisiones no deben ser políticas, sino sustentadas jurídicamente. Por eso el Congreso debe allegarse todos los datos del proyecto y entonces decidir si se pronuncia por la clausura de los trabajos de construcción.

Ángela Hernández Solís, de Convergencia, informó que luego de la gira los legisladores se reunieron con representantes de Comex Hidro, quienes les entregaron información del proyecto y les aseguraron que actúan legalmente.

Señaló que la inquietud de los diputados es no sólo contar con la información de la empresa, sino de cómo las instituciones otorgaron los permisos.

Sobre la petición de los vecinos de parar la obra mientras no se publique el estudio de impacto ambiental, dijo que el documento existe, pero “necesitamos uno hecho por gente independiente, porque en este vemos que se minimiza el daño que se está provocando.

No estamos contra el desarrollo, sino en favor del progreso. Rechazamos que se agreda la naturaleza y el entorno de los dueños de las tierras aledañas a la presa Cerro de Oro, afirmó.

Comentó que las presas Cerro de Oro y Temascal, construidas para regular las aguas del río Santo Domingo, desplazaron a muchos habitantes de la zona y descartó que el proyecto de la planta hidroeléctrica en el primero de esos embalses sea benéfico, porque es sabido que esta región es muy calurosa y pagamos la energía muy cara.

Respecto de los permisos señaló que hay dudas, pues ya iniciaron las obras y los constructores aún no tienen total posesión de las tierras que serán afectadas.

Flavio Sosa comentó que en reunión pidió a representantes de Comex Hidro parar las obras mientras el Congreso local se allega toda la información del proyecto y está en posibilidad de hacer un pronuniciamiento.