Los magistrados Jorge Mario Pardo Rebolledo, Alberto Gelasio Pérez Dayán y Jorge Higuera Corona, candidatos a la plaza vacante en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), coincidieron ayer en señalar ante senadores que se debe vigilar el trabajo que realizan los jueces, ya que la corrupción de algunos elementos afecta la imagen de todo el Poder Judicial.

Hay una imagen devaluada de los jueces en la sociedad. Para nadie es desconocido que la sociedad no confía en los juzgadores, hay insatisfacción con la impartición de justicia y ese es el gran reto que tenemos”, el de incrementar la confianza de la ciudadanía en nuestro trabajo, resaltó el magistrado Pardo Rebolledo.

Junto con el magistrado Pérez Dayán coincidió en advertir que en la actual coyuntura, dominada por la lucha contra el narcotráfico, se ha abusado de las figuras de arraigo y testigo protegido, que atentan contra el principio constitucional de presunción de inocencia.

Al comparecer ante las comisiones unidas de Justicia y Estudios Legislativos Primera y en respuesta a un cuestionamiento del petista Ricardo Monreal, el magistrado Pérez Dayán dijo que si bien la SCJN no puede definir una política de seguridad que frene la violencia y la inseguridad actual, las sentencias justas y equilibradas, más tarde que temprano, llevarán a la justicia social.

El magistrado hizo notar que el hombre no es malo por naturaleza, sino que son muchas las acciones que lo hacen delinquir. A pregunta expresa del perredista Pablo Gómez, Pérez Dayán sostuvo que el Estado mexicano está obligado no sólo a atender las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, sino que debe honrar todos los tratados internacionales y aquellas resoluciones que se refieren a las garantías fundamentales.

Pardo Rebolledo e Higuera Corona fueron también cuestionados en torno a la sentencia de la Corte Interamericana, que obliga a México a legislar en materia de fuero militar. Ambos explicaron que no podían adelantar un criterio, porque son temas que se analizan actualmente en la SCJN, y de ser electos tendrían que excusarse y no participar en esa discusión.

La comparecencia duró cinco horas y sirvió para que los aspirantes a ocupar el cargo dejado en la Corte por el ministro José de Jesús Gudiño Pelayo, fallecido el pasado mes de septiembre, aclararan versiones y rumores sobre sus trayectorias.

El coordinador del PT, Ricardo Monreal, preguntó a Pardo Rebolledo si tiene algún vínculo con personajes del estado de México o del Senado, y si ha sido presionado o amenazado para resolver algún caso, como han publicado algunos medios. Le puedo asegurar, con la cara en alto y viéndolo de frente, que jamás he dejado que aspectos como éstos influyan en alguna decisión de las que he tenido como juzgador.

Sostuvo que no tiene relación con ningún personaje. No me interesa llegar a la Corte por recomendación o por compromiso con nadie, sino basado exclusivamente en mi carrera judicial, recalcó, e hizo notar que ha llevado asuntos muy trascendentes en la historia judicial del país.

El magistrado Pérez Dayán consideró también que debe haber un escrutinio escrupuloso de las sentencias que han emitido los tres aspirantes y debe ser uno de los criterios fundamentales en la elección del nuevo ministro.

Igualmente, Higuera Corona resaltó la independencia, autonomía y el patriotismo que deben caracterizar a los jueces, y sobre todo a quienes aspiren a ser ministros de la SCJN.

Las comisiones unidas elaboraron anoche mismo el dictamen de elegibilidad de los integrantes de la terna, y si hay acuerdo inicial entre las fuerzas políticas, este jueves los tres magistrados comparecerán ante el pleno para exponer sus propuestas y ser votados.

Monreal advirtió que ojala en esta ocasión se logre la mayoría calificada y no como la vez anterior, en que se regresó la terna porque el PAN se negó a respaldar a la candidata que tenía el mayor número de votos.

Ayer, sin embargo, el coordinador de los senadores del PAN, José González Morfín, dijo que su bancada podría elegir a cualquiera de los tres magistrados, ya que todos cuentan con carrera judicial. No estamos casados con ninguno de ellos.

Durante la comparecencia, el priísta Ricardo Fidel Pacheco se congratuló de que Calderón no hubiera partidizado la elección del ministro.