El trofeo Vince Lombardi volvió a poder de los Empacadores, tras 14 años de espera
Aaron Rodgers, el jugador más valioso
Greg Jennings, Jarrett Bush y Jordy Nelson demolieron la Cortina de Acero
Lunes 7 de febrero de 2011, p. 2
Arlington, 6 de febrero. Tres pases completos a las diagonales de Aaron Rodgers, dos anotaciones de Greg Jennings y un par de intercepciones de Jarrett Bush llevaron a los Empacadores de Green Bay a conquistar el Supertazón 45, al vencer 31-25 a Acereros de Pittsburgh para aportar el cuarto título en su historia, tras los obtenidos en 1967, 1968 y 1996.
El trofeo Vince Lombardi retornó a Green Bay luego de 14 años, gracias en parte a la conducción de Rodgers, su mariscal de campo, quien fue nombrado el jugador más valioso, pues además de los tres envíos de anotación consiguió 24 lanzamientos efectivos de 39, para una ganancia de 304 yardas y cerrar con broche de oro al ser el mejor quarterback de la liga.
Empacadores y Acereros dieron la batalla hasta el final, en un último periodo vibrante en el que cualquiera de los dos equipos hubiera sido un digno campeón, pero en esta ocasión tocó a los cabezas de queso conseguir el anhelado título en el estadio de los Vaqueros.
El ataque aéreo de Green Bay y la actuación de su receptor Jordy Nelson fueron mortales para la Cortina de Acero, que estuvo a punto de empatar el partido e incluso buscar la anotación del triunfo que le daría un séptimo anillo, pero Bush, con el olfato agudo, logró la intercepción a Ben Roethlisberger (la segunda) para cambiar el destino de su equipo, que también aprovechó tres balones perdidos de Pittsburgh y se proclamó campeón.
Ambos conjuntos ofrecieron un cierre cardiaco en el último cuarto. Clay Mathews, de Green Bay, provocó un fumble a Rashard Mendenhall para que Rodgers enviara el pase de anotación a Jennings (el segundo de la tarde-noche), ante la mirada atónita de Troy Polamalu; la pizarra se movió 28-17.
Vino la ebullición de Big Ben y Pittsburgh comenzó a invadir terreno, al hacer un engaño que se convirtió en anotación de Mike Wallace y luego jugó la conversión de dos puntos que hizo efectiva Antwan Randle El (28-25).
Empacadores aumentó la cifra con el gol de campo de 23 yardas de Mason Crosby (31-25), luego del fallido intento de Rodgers, pero Bush le salvó el partido con la intercepción a Roethlisberger, quien se quedó con 25 pases de 40, 263 yardas, dos lanzamientos de anotación y un par de intercepciones.
Green Bay marcó el destino desde el inicio. La defensiva fue una verdadera trinchera en la que poco o nada pudo hacer Big Ben, al sufrir una costosa intercepción para que su equipo se fuera al descanso abajo con 11 puntos de diferencia.
En cambio, Rodgers se llevó las palmas y de paso se sacudió la sombra de Brett Favre, presente en el estadio, quien vio ganar de nuevo a los Empacadores tras una espera de 14 años.
Green Bay se puso adelante en el marcador 7-0 tras envío de 29 yardas de Rodgers sobre Jordy Nelson, para que Mason Crosby sumara el punto extra.
Sin embargo, la defensiva, una vez más, acuchilló al grandote Roethlisberger, quien no soportó la voluminosa humanidad de BJ Raji y su pase fue interceptado en las manos de Nick Collins, quien corrió 37 yardas para pisar las diagonales y el marcador se extendió con el extra de Crosby (14-0).
Con Roethlisberger que se quejaba de dolores en la rodilla izquierda, Pittsburgh no podía romper la muralla de Empacadores y sólo pudo inaugurar la pizarra con un gol de campo de 33 yardas, de Shaun Suisham.
Ambos equipos sufrieron las bajas por lesión de Emmanuel Sanders y Donald Driver, a casi nueve minutos del segundo cuarto, cuando Big Ben sumó su primera intercepción, realizada por Jarrett Bush.
El ánimo de los jugadores de Pittsburgh, que llevaban también dos balones perdidos, estaba por los suelos, y Rodgers les pegó en el orgullo al enviar un potente disparo a Greg Jennings, quien se quitó adversarios y el pase de 21 yardas tuvo efecto y extendió la ventaja para Green Bay (21-3).
Empero, vino el despertar de Pittsburgh y con un pase profundo por la izquierda de su mariscal acortó distancias al combinarse por fin con Hines Ward (ocho yardas), y con el extra de Suisham se fue al descanso 21-10, mientras Empacadores sumó otra baja, con la salida de Charles Woodson.
Para el siguiente episodio, Pittsburgh, en su primera serie ofensiva, logró otra ansiada anotación, con pase de Big Ben a Mendenhall, de ocho yardas, más el extra de Suisham, con ello la Cortina de Acero acortó a cuatro puntos el marcador (21-17).
La desesperación y el nerviosismo de sus jugadores provocaron sendos errores a Empacadores, que terminaron el tercer cuarto sin hacer daño en la zona rival.
Durante el calentamiento se oyó música de grupos como Led Zeppelin, Joan Jett, AC/DC, entre otros, además de que se presentó la banda de la Universidad Cristiana de Texas (TCU), actuales campeones del futbol americano colegial.
El lado patriótico de los estadunidenses no podía faltar en el magno escenario. La cantante Christina Aguilera entonó a capela el himno de Estados Unidos, dando muestra de los tonos que puede alcanzar su educada voz, mientras aviones de combate sobrevolaban el estadio y por las pantallas gigantes aparecían las imágenes de soldados que se encuentran en Medio Oriente.
El glamour de Hollywood se combinó con el deporte y la política, tanto en las tribunas como en el campo de juego. Adrien Brody, Michael Douglas, Owen Wilson y Cameron Díaz acaparon la atención, al igual que Favre, Alex Rodríguez y Sugar Ray Leonard, así como el ex presidente George Bush y la ex secretaria de Estado Condoleezza Rice.
Afuera del estadio texano miles de aficionados observaron el partido en enormes pantallas, algunos de los cuales no pudieron ingresar, a pesar de tener boleto de 900 dólares, pero la NFL anunció que se les devolverá al triple de su valor. Los revendedores pidieron hasta 3 mil dólares por una entrada.
