Hubo fallas en la cadena de mando y negligencia en su supervisión, revela el Pentágono
El soldado de 23 años desarrolló estrés luego de ser reclutado por el ejército
Jueves 3 de febrero de 2011, p. 24
El soldado estadunidense Bradley Manning, acusado de filtrar al sitio Wikileaks cientos de miles de documentos sobre las guerras de invasión a Irak, Afganistán y cables diplomáticos, nunca debió ser enviado como analista de inteligencia a Bagdad ya que estaba mentalmente incapacitado, concluyó un informe del Pentágono que revela este jueves el periódico británico The Independent.
Manning, de 23 años, quien enfrenta ocho cargos federales por las filtraciones a Wikileaks, servía en el fuerte Drum en Nueva York cuando algunos especialistas se pronunciaron en contra de que fuera desplegado a Irak. No obstante, sus superiores ignoraron la recomendación, según una investigación interna del ejército estadunidense.
El Departamento de Defensa también culpó a oficiales de inteligencia en Bagdad por fallar en la supervisión del soldado y por no haber mantenido un nivel apropiado de seguridad para proteger la información secreta.
Hubo grandes fallas de liderazgo en la cadena de mando y gran negligencia en la supervisión de Manning en Irak
, dijo un oficial de Defensa al diario estadunidense The Washington Post.
Las revelaciones ocurren cuando varias voces se alzan en protesta porque el soldado Manning es retenido en condiciones inhumanas en una base militar de Quantico, Virginia, a la espera de ser juzgado.
Esta semana Amnistía Internacional (AI) hizo un llamado al gobierno británico para presionar a Washington y obligar a mejorar las condiciones de confinamiento del soldado. Manning debería ser considerado ciudadano británico, ya que su madre nació en Gales, añadió.
Nos gustaría que lo visitaran funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores tal y como lo harían con un británico detenido fuera de su país, y a punto de ser juzgado por (alta traición) cargos muy serios
, dijo Kate Allen, directora en el Reino Unido de AI.
El ejército estadunidense dijo que esta investigación está separada de la indagatoria criminal que se le sigue a Manning en el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Manning enfrenta cargos por filtrar documentos secretos robados entre el 19 de noviembre y el 27 de mayo de 2007, entre ellos dos videos que muestran matanzas de civiles en Irak y Afganistán, y no por los 250 mil cables que comenzaron a ser filtrados en noviembre pasado por la página de Wikileaks que pusieron al descubierto a la diplomacia estadunidese.
La investigación del ejército encabezada por el teniente general Robert L. Calsen, encontró que mientras Manning no tenía problemas emocionales discernibles al ser reclutado por el ejército, posteriormente desarrolló un estrés que se presume tuvo que ver con problemas en sus relaciones.
Algo sucedió en su vida personal después de unirse al ejército
dijo Calsen.
Los investigadores aparentemente encontraron conductas de furia que se dispararon cuando Manning aún estaba en el fuerte Drum y esto persuadió a los especialistas de que enviarlo a Irak sería una mala idea. El ejército alegó que la recomendación fue ignorada por la escasez de analistas de inteligencia desplegados en ese momento en Irak.
La investigación demuestra que el ejército falló en cuidar al soldado
señaló David Coombs, abogado defensor de Manning.