El museo Carrillo Gil también inauguró las muestras de Mark Manders y Sofía Táboas
Del artista holandés se abrió la exposición Obra de referencia/ Reference work
Jueves 3 de febrero de 2011, p. 4
Ratones, perros, camas y otros elementos adquieren nuevos significados desde la perspectiva estética del artista holandés Mark Manders, en una serie de piezas que integran la exposición Obra de referencia/ Reference work, que ayer se inauguró en el Museo de Arte Carrillo Gil, además de las muestras Superficies límite y Banquete Gurrola.
La exhibición de Manders, explicó la curadora Ruth Estévez, pretende crear nuevas frases y sentencias. El trabajo del artista no tiene una cronología determinada; alguna es obra de hace años y otra creada recientemente
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El artista utiliza materiales como bronce y barro, además de periódicos que él mismo imprime, agregó Estevez.
La exposición refleja cómo los objetos se amontonan o fusionan entre sí para formar una nueva frase, fuera de todo uso conocido; son sólo obras escultóricas, estáticas, carentes de función más allá de su presencia estética
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Evocan a un artista innovador
A tres años de la muerte de Juan José Gurrola (1935-2007) se presenta la exposición Banquete Gurrola en otra de las salas del recinto de avenida Revolución 1608, San Ángel, en la cual se observa la obra gráfica del artista y se realiza una revisión de los trabajos de quien protagonizó cambios en los parámetros artísticos del país.
Esta muestra reúne una serie de servilletas dibujadas por Gurrola en restaurantes o cantinas, cuyo motivo principal es la mujer, la seducción y el erotismo.
El artista desarrolló su obra y pensamiento en diversas disciplinas artísticas y en estrecho intercambio con los personajes más relevantes de su generación, como los escritores Juan García Ponce, Salvador Elizondo, Alejandro Jodorowsky y Jorge Ibargüengoitia, así como con Manuel Félguerez, entre otros.
Revisión de una trayectoria
La tercera exposición que alberga ese recinto, se titula Superficies límite, y es una revisión a la trayectoria de Sofía Táboas.
La artista presenta obras creadas específicamente para ese recinto y reflexiona sobre cómo nuestra percepción funciona dentro de un espacio habitable, mediante materiales que sugieren un exceso y parecen cancelar su uso inicial.