Lunes 31 de enero de 2011, p. 26
La postergada construcción del aeropuerto internacional de la Riviera Maya, uno de los principales proyectos de infraestructura del gobierno del presidente Felipe Calderón, tropezó con un nuevo obstáculo cuando este domingo la Comisión Federal de Competencia (CFC) autorizó que sólo dos de los tres consorcios interesados participen en la licitación correspondiente, cuyas bases se lanzaron hace ya dos años.
El organismo regulador prohibió que el Aeropuerto de Cancún y Servicios Aeroportuarios del Sureste (Asur) –que cuenta con nueve aeropuertos en el sur del país– concurse en el proceso, para evitar la concentración excesiva en el mercado de los servicios aeroportuarios
en la zona.
La resolución del pleno del órgano regulador fue tomada por mayoría, con el argumento de que si Asur opera el aeropuerto de la Riviera Maya en el municipio de Tulum, como ya lo hace con el de Cancún, se cancela la oportunidad de competencia entre ambas terminales, en detrimento de los consumidores y del turismo.
Así que en la licitación del aeropuerto de la Riviera Maya –para el cual se calcula una inversión de 250 millones de dólares– sólo podrán participar Tradeco Infraestructura así como Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) en conjunto con Grupo México, los cuales no tienen presencia en el estado de Quintana Roo.
Entre Cancún y la Riviera Maya apenas hay 130 kilómetros, por lo que Eduardo Pérez Motta, presidente de la CFC, aseveró que es una oportunidad histórica de tener competencia entre dos aeropuertos cercanos. Permitir la entrada de Asur a la licitación habría puesto en riesgo esta oportunidad y habría dañado a los consumidores y al turismo en la zona turística más importante del país
, según un comunicado difundido este domingo por el organismo.
Podría haber apelación
Playa del Carmen, que aporta casi 30 por ciento de la oferta de hospedaje de la región, se encuentra casi a medio camino de Cancún y la Riviera Maya, por lo que dijo que los turistas podrán elegir entre ambos aeropuertos conforme a condiciones de calidad y precio.
Según Reuters, Fernando Chico Pardo, el mayor accionista y presidente de Asur, advirtió a finales del año pasado que si la CFC le negaba la oportunidad de participar en el concurso, apelaría de la decisión, lo que podría retrasar todavía más el proceso.
Grupo México, dedicado a la minería y una red ferroviaria, busca incursionar en el mercado aeroportuario con la licitación de la terminal aérea de la Riviera Maya.