El Gobierno del Distrito Federal (GDF) no sólo tiene la posibilidad legal de suspender la supervía poniente, también está obligado, pues algunos procedimientos para realizar la obra están fuera de la ley y viciados de origen, por lo que son nulos, señaló el Frente Amplio opositor a la vía de cuota.

En conferencia de prensa con otras organizaciones de la sociedad civil, entre ellas Litiga Ole, advirtió que el exhorto de la Comisión de Derechos Humanos capitalina es la conclusión a la que llegó un órgano de Estado, facultado por ley para señalar los agravios cometidos por las instancias de gobierno, y si bien la recomendación no tiene carácter vinculatorio, la administración de Marcelo Ebrard está obligada a reparar el daño que ocasionó.

La postura fue dada a conocer en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro, en el que se dejó claro que si el gobierno capitalino quiere ser congruente con su discurso de protección a las garantías fundamentales, debe aceptar en su totalidad el exhorto, así como retirar la fuerza pública de la zona expropiada de La Malinche y cesar los actos de hostigamiento contra todos los ciudadanos que han manifestado su rechazo a la supervía poniente.

Recursos en tribunales

Advirtió que existen recursos legales en proceso, como el amparo 605/2010 y el juicio de nulidad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, por lo que si el gobierno quiere demostrar su compromiso con la legalidad deberá parar las obras mientras se da un fallo.

Ayer también, vecinos de Xochimilco y Tlalpan se presentaron en la sede de la CDHDF para respaldar al ombudsman capitalino, Luis González, pues es “el único órgano del Estado que actúa en defensa del pueblo, y la recomendación sólo evidencia las irregularidades cometidas, que no se pueden permitir.

Por otra parte, el líder local del PRD-DF, Manuel Oropeza, dijo que seguirá llamando al diálogo a autoridades y vecinos en el caso de la supervía poniente.

Entrevistado tras acudir al informe de actividades de los diputados federales del sol azteca que representan a la ciudad de México, destacó la urgencia del diálogo entre ambas partes y construir una ruta común que permita distensar la situación... eso implicaría suspender de momento la obra”.

Destacó que la CDHDF está en la lógica de que se podía haber organizado una consulta, lo que conlleva informar a la gente; cuando eso no se hace se dan escenarios como el actual.