La eterna lucha entre el bien y el mal que plantea la tradición judeo-cristiana está llamada a convertirse en el próximo gran fenómeno literario en términos de consumo entre el público adolescente y juvenil.

Por lo menos es el vaticinio del escritor y cineasta mexicano Arturo Anaya Treviño, autor de la saga Ángel caído: el fin del mundo está cerca (Suma de Letras), cuya primera de tres entregas, titulada Sephyro, agotó en seis meses los 15 mil ejemplares de la edición inicial y está por ocurrir lo mismo con la segunda, integrada por el mismo tiraje.

Eso ocurre en tanto se estrena la versión cinematográfica de esa primera novela, con el mismo título, cuyo guión y dirección está a cargo del autor, lo cual ocurrirá en nuestro país el próximo 2 de septiembre, con 200 copias, aunque la campaña de promoción a escala nacional comenzará en febrero.

A sus 31 años, al joven creador no le preocupa que su trilogía, en términos aparentes, esté fuera de las directrices de lo que determinan en la actualidad el gusto y el interés literarios de los chavos, con series o sagas como las de El señor de los anillos, Narnia, Harry Potter y Crepúsculo.

“Como en todo, en la literatura también hay modas y éstas van cambiando. En las librerías cada vez hay más títulos de reciente escritura sobre ángeles, y me da gusto; no lo siento como competencia, porque esta obra (Ángel caído) ha influenciado a ciertos sectores para tocar este tema”, señala Arturo Anaya en entrevista.

Lo que viene son los ángeles, y tiene mucho que ver con un vacío existencial en la raza humana; se ha perdido la credibilidad en muchas instituciones y las personas buscan respuestas a preguntas esenciales.

Ninguna pretensión religiosa

La literatura fantástica a partir de esos personajes y la eterna lucha entre el bien y el mal, según Arturo Anaya, posiblemente ayuda al lector a reparar en las preguntas universales que trae cada quien en la cabeza: ¿quiénes somos?, ¿de dónde y a qué venimos?

Por eso son cada vez más las personas que se acercan a estos temas y es natural que surja mayor número de productos, indica. No dudo que a raíz de la película se desaten más historias y libros similares a los míos.

Angel caído es una saga de fantasía épica sobre la ancestral lucha entre el bien y el mal, a partir de encarnizadas confrontaciones entre ángeles y demonios, y en la que un personaje procreado por un ser celestial y una humana, denominado Sephyro, debe recuperar y custodiar una espada que, en manos de Luzbel, puede desatar el apocalipsis.

Detrás de esta historia, cuya escritura el autor comenzó a los 18 años con el propósito de llevarla al cine, no hay mayor pretensión que crear una cosmogonía y mitología personales.

Para nada hay una pretensión religiosa, ni siquiera espiritual. Soy muy respetuoso de las libertades de culto y credo; no trato de imponer algún tipo de creencia. En ningún momento se tocan temas religiosos, no se habla de rituales ni sacramentos. Mi interés es más místico y sólo retomo algunos personajes y situaciones de la religión (católica), aclara.

Quise hacer una historia fantástica, épica, de aventuras donde uno pudiera divertirse, entretenerse y quedarse con algo, pero sin apelar a la moral ni imponer creencias ni costumbres.

Arturo Anaya comenta que la inspiración y el punto de partida de esta saga fueron El paraíso perdido, de John Milton, y la Divina comedia, de Dante Alighieri, obras que leyó en la adolescencia.

Cuando buscaba un tema para escribir, recuerda, me di cuenta de que en la actualidad no se ha desarrollado una divina comedia ni un paraíso perdido más apegados a los conocimientos científicos y las creencias religiosas que tenemos en esta época, los cuales son muy diferentes a los de los de siglos en que se escribieron esos libros.

Dos fueron las razones por las que el escritor y cineasta decidió enfocar estas novelas al público adolescente y juvenil.

La primera, explica, tiene que ver con que comenzó a escribirla apenas pasada la adolescencia y tenía aún muchas de las inquietudes, preocupaciones y maneras de pensar y actuar de esa etapa. La segunda obedece a que, según su impresión, el cine nacional descuida demasiado a niños y adolescentes.

“Estaba entonces casado con la idea de hacer algo para los chavitos y los teenager, algo con lo que pudieran identificarse, y siento que eso es muy fácil que ocurra con mi personaje principal, pues comparten muchas cosas”, agrega.

“Una de mis ideas es que las generaciones que les tocara el Ángel caído crecieran con el personaje. La mayoría de mis lectores están entre los 11 y 14 años, son los fans más fuertes, aunque a los 16 o 17 años también les interesa”.

Versión en cómic

Los siguientes dos títulos de esta serie aparecerán, de forma respectiva, en octubre de este año y a principios de 2011. El primero estará dedicado al Génesis y el segundo al Apocalipsis.

La saga Ángel caído forma parte de un proyecto más amplio de Arturo Anaya, denominado de manera general El fin del mundo está cerca.

Además de las propuestas literaria y cinematográfica ya referidas, también se realizó una versión en cómic, publicada en 2008, que explica el origen de los personajes de esa trilogía.

De igual manera, se creó en Internet una página en la que se agrupan todos los proyectos. La dirección electrónica es www.elfindelmundoestacerca.com.mx y en ella puede accederse a información detallada de esta amplia propuesta.

Por ejemplo, es posible acceder a la sinopsis y algunos capítulos de la novela, a los ejemplares del cómic, así como a videos, banda sonora y material fotográfico de la película, además de permitir suscribirse a la página para recibir información constante y poder hacer descargas de material de esa serie.