De los arrestados, 91 son sospechosos de pertenecer a siete familias italianas
“Es la operación más importante en el desmantelamiento de la Cosa Nostra”: fiscal general
Viernes 21 de enero de 2011, p. 24
Nueva York, 20 de enero. La Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) arrestó este jueves a 127 presuntos miembros de la mafia en Nueva York y sus alrededores. Tuvo un alcance muy amplio
, señaló el vocero de la FBI, Robert Nardoza, sobre el operativo realizado esta madrugada en Nueva York, Nueva Jersey y Rhode Island (noreste); los cargos van desde tráfico de drogas y extorsión hasta homicidio.
De los 127 arrestados, 91 son sospechosos de pertenecer a siete familias de la mafia italiana, cinco de ellas residentes en Nueva York, según un comunicado del Ministerio de Justicia.
En señal de la importancia que supone esta operación, el fiscal general estadunidense, Eric Holder, llegó a Nueva York este jueves y ofreció una rueda de prensa conjunta con la subdirectora de la oficina de la FBI en Nueva York, Janice Fedarcyk, en la oficina del fiscal general en Brooklyn.
“Las detenciones de hoy marcan un avance importante en el desmantelamiento de las actividades ilegales de la Cosa Nostra”, declaró Holder.
Participaron más de 800 agentes
Se trata de la operación más importante jamás realizada en un solo día, en la que han participado más de 800 agentes de la FBI
, destacó el fiscal general.
Aun en comparación con los más implacables esfuerzos contra la mafia que el gobierno estadunidense ha ejecutado recientemente, la operación no tuvo precedentes, y los 127 sospechosos fueron arrestados en diversos estados.
De acuerdo con The New York Times, los asesinatos de los que se acusa a algunos de los detenidos fueron perpetrados en las décadas de 1980 y 1990. Además, las acusaciones también incluyen extorsión, blanqueo de dinero, apuestas clandestinas y chantaje relacionado con la industria de la construcción y portuaria.
La policía estima que estas dos últimas actividades están controladas por las cinco familias de la mafia italiana que viven en Nueva York: los Genovese, los Gambino, los Lucchese, los Colombo y los Bonanno.
Desde el inicio de la década de los 90, la FBI ha llevado a cabo importantes operaciones contra el crimen organizado de origen italiano, que está en declive desde entonces, afectado además por la competencia de las bandas mafiosas rusas, mexicanas y chinas.
Asimismo, destacadas deserciones en las filas de la mafia italiana han permitido ofrecer información a los investigadores para llevar a cabo las detenciones.
Entre ellas se cuenta la de John Gotti, jefe del clan de los Gambino, condenado en 1992 por haber ordenado una decena de asesinatos, entre ellos el de su predecesor, Paul Castellano, muerto en 1985 cuando salía del restaurante Sparks, en Manhattan.
Gotti falleció en prisión en 2002. Desde entonces, su hijo John Junior Gotti ha conseguido escapar en numerosas ocasiones de la policía, la última en 2009.
El arresto más significativo podría ser el de Luigi Manocchio, alias Baby Shanks, jefe de la familia Patriarca, de Nueva Inglatera, quien fue arrestado el miércoles en Foart Lauderdale, Florida, y quien es acusado principalmente de recolectar el pago de protección
que la mafia exige a propietarios de clubes de desnudo en Estados Unidos.
Sin embargo, expertos citados por el diario británico The Independent señalan que la familia Colombo es la más afectada por los arrestos de la FBI. Apenas la semana pasada, es subjefe de la misma, John Franzese, alias Sonny, fue sentenciado a ocho años de prisión por extorsionar clubes propiedad de las revistas Hustler y Penthouse en Manhattan. Franzese tiene 93 años y es improbable que salga de prisión.
El arma favorita del gobierno en la larga guerra contra las familias de la mafia son los miembros de dichos grupos que sirven de informantes, y posteriormente, testigos de las autoridades. A principios de los 90, Salvatore Gravano alias Sammy el toro recibió protección oficial a cambio de brindar el testimonio que llevó al arresto de John Gotti.
Pese al golpe que recibió este jueves el crimen organizado, documentos oficiales de la fiscalía admiten que el gobierno aún no logra contrarrestar el control que la mafia ejerce en importantes sindicatos como son el de la fabricación de cemento, la construcción y los puertos marítimos.