Lunes 17 de enero de 2011, p. 31
París, 16 de enero. Marine Le Pen, al asumir este domingo la presidencia del ultraderechista partido francés Frente Nacional (FN), que hasta el sábado estuvo presidido por su padre Jean-Marie, abogó por un partido defensor de un estado fuerte, durante su primer discurso como titular de la formación.
Del mismo modo que recogimos la bandera tricolor (francesa) que la clase política dejó tirada en la cuneta, levantaremos los valores tradicionales de la República francesa. ¡Los verdaderos defensores de la República somos nosotros!
, declaró en la clausura del congreso del partido en la localidad de Tours que la colocó como su nueva líder.
La democracia no nos asusta
, señaló Marine antes de abogar por un Estado fuerte. En un momento en que la crisis y la globalización arrasan, cuando todo se derrumba, todavía queda el Estado
, agregó la nueva presidenta del FN.
Lejos de los valores católicos tradicionalistas defendidos por una parte de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen afirmó que el Estado debe ser el garante
de la laicidad para defenderse de la islamización
.
En este sentido, dijo, el Estado debe prohibir el establecimiento de horarios especiales en las piscinas para las mujeres musulmanas y la introducción de prohibiciones alimentarias religiosas
en los comedores escolares.
¡Los verdaderos defensores de la República somos nosotros!, declaró en la clausura del congreso del partido, en la localidad de Tours, que la colocó como nueva líderFoto Reuters
Marine Le Pen, de 42 años, fue oficialmente nombrada el frente del FN tras imponerse en una consulta interna organizada por el movimiento con 67.65 por ciento de los votos contra 32.35 de su rival Bruno Gollnisch, quien reconoció su derrota y rechazó la presidencia de la formación política.
Después de 40 años de la titularidad de Jean-Marie Le Pen, de 82 años, pasó el cargo a su hija, que se convierte así en la probable candidata del FN a las elecciones presidenciales de 2012.
Los sondeos sobre la intención de voto le dan hasta el 18 por ciento en la primera vuelta de las presidenciales, en las que espera repetir la hazaña de su padre que llegó a la segunda vuelta en 2002.
La abogada intenta dar una nueva imagen de modernidad al partido, que fundó su padre en 1972 y que cuenta con 22 mil 400 miembros. No obstante, sus ideas apenas se diferencian de las de Jean-Marie, pues defiende también la instroducción de la pena de muerte en Francia y el abandono del euro.