Nuevo hallazgo de niños y adultos esclavizados en Mendoza
Lunes 17 de enero de 2011, p. 30
Buenos Aires, 16 de enero. La Mesa de Enlace, que reúne a cuatro entidades patronales del campo, comenzó esta medianoche un paro con el que bloqueará la venta de granos durante una semana, pese a que el gobierno argentino liberó las exportaciones de excedentes de trigo, y del rechazo de pequeños productores y organizaciones rurales del interior del país.
La Sociedad Rural eligió el primer mes del año para reanudar su ofensiva sobre el gobierno nacional, que intentará reforzar a partir de marzo
, señala el escritor y periodista Horacio Verbistky, al analizar que las patronales del campo rechazan toda intervención estatal, incluyendo el control de la evasión impositiva y señala que esto se produce en el marco de las campaña en un año electoral. Para los más poderosos, cualquier límite que el Estado ponga a su libertad de acción es intolerable, aunque se base en el bienestar colectivo
, añade.
Esta semana que pasó, la llamada Mesa de Enlace, que integran los poderosos terratenientes de la Sociedad Rural (SRA), Coninagro, Confederaciones Rurales Argentinas (Carbap) y la Federación Agraria (FA), llegó a una reunión con el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner con la decisión de no aceptar nada que se le propusiera.
A pesar de los grandes beneficios en el último año para diversos sectores de la producción del campo, de subsidios, créditos altamente favorables y las enormes ganancias de los últimos tiempos, la Mesa de Enlace sigue con su posición, después de que sus dirigentes confesaron públicamente la intención de ayudar
a la destitución presidencial.
Será difícil que ahora puedan lograr apoyos como entre marzo y julio de 2008, cuando realizaron un paro con bloqueo de carreteras estratégicas, apoyados por grupos y movimientos golpistas, y socios
de la pasada dictadura militar (1976-1983).
Ahora han salido voces contra el paro. En varios comunicados líderes rurales del interior, como el Consejo Argentino de Productores (CAP) y la propia Sociedad Rural de Mortero (Córdoba), se manifestaron indignados
ante la medida. Denunciaron que esto no guarda relación ni con la alta rentabilidad del sector ni con las políticas de regulación desarrolladas desde el gobierno
.
Mientras los patrones y dueños de tierras bloqueaban los caminos, sus peones continuaban trabajando, sin protección social la mayoría, lo que desde final de 2010 se investiga, arrojando cifras asombrosas de esclavitud rural en varios lugares del país, como sucedió en las últimas semanas.
Esto ha llevado a revisar las leyes que perduran en las zonas rurales desde la pasada dictadura militar, que dejaron en el desamparo a miles de trabajadores rurales, cuyos sindicatos están en manos de dirigentes asociados con las patronales.
En su encuentro con el gobierno estas entidades patronales se desentendieron sobre los reclamos en relación a esta dramática situación, que en estas horas sigue destapando una tragedia social insostenible, cuando en un predio del ejército alquilado por patronales rurales en Mendoza al norte del país, fueron encontrados niños y adultos en condiciones infrahumanas y degradantes.
Por su parte, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, sostuvo la importancia que tendría que las patronales repudien el trabajo esclavo
, y criticó a los parlamentarios opositores por frenar el tratamiento de la ley de trabajo rural, que se intenta debatir desde diciembre de 2008.
También denunció la violencia que enfrentan los empleados del ministerio cuando intentan realizar tareas de inspección en los establecimientos rurales
, y la presiones para que este Parlamento, dominado por la oposición, no avance” en esa ley tan importante.
Otro elemento que desacreditó este tipo de protesta rural es que en 2009, Hugo Biolcati, de la poderosa Sociedad Rural alentó acciones para que la presidenta Cristina Fernández no terminara su mandato. Lo mismo hizo Eduardo Buzzi, de la FA quien confesó ante algunos medios que ha trabajado y trabaja para desgastar al gobierno.
Analistas advierten que la muerte del ex presidente Néstor Kirchner, el pasado octubre, destapó una realidad ocultada por el poder mediático
y evidenció la popularidad que habían alcanzado el ex mandatario y su esposa, cuya imagen creció en todas las encuestas últimas.
Lo más grave es la oposición de la Mesa de Enlace a que la justicia siga en su lucha contra la esclavitud en las zonas rurales, lo que evidencia cuál es el verdadero rostro de las patronales.