El aumento de los precios de la energía podría afectar el crecimiento económico, advirtieron especialistas quienes señalaron que es posible que el Banco de México mantenga una vigilancia del comportamiento de los precios de las materias primas, no sólo por posibles impactos en el corto plazo, sino de manera fundamental porque puede afectar las expectativas de inflación.

Eric Rosegren, presidente de la Reserva Federal de Boston, afirmó: Los energéticos restarán ingresos a las familias y debilitarán el gasto.

En las últimas cinco semanas el precio del crudo de exportación registró un aumento de 6.6 por ciento al pasar de un precio de 80.58 dólares por barril a 85.94 dólares. Sólo en la última semana el precio de la mezcla mexicana de exportación aumentó 3.02 dólares por barril para situarse en un nuevo máximo en este año de casi 86 dólares por barril.

Esta cotización es 20.54 dólares superior al precio presupuestado en la Ley de Ingresos de 2011, fijada en 65.4 dólares por barril.

La tendencia alcista internacional en los precios de las materias primas, incluida el petróleo, motivó que los especialistas del grupo financiero Banamex modificaran la expectativa del precio promedio de la mezcla mexicana de crudo de exportación en 2011, de 80 dólares por barril inicialmente establecida, a 86 dólares por barril.

Lourdes Rocha, especialista en temas petroleros de Banamex consideró: pensamos que los precios del petróleo seguirán siendo apoyados más por los flujos de inversión que por los fundamentos tradicionales de oferta-demanda.

El incremento de los precios del crudo, así como de otros energéticos, podrían eventualmente afectar otros precios como el de las tarifas eléctricas, las cuales deben de tomar en cuenta los precios de los combustibles fósiles necesarios para la generación de energía eléctrica como: combustóleo, gas natural, diesel y carbón.

Aunque el gobierno federal tiene prevista una inflación para todo 2011 de alrededor de 3.9 por ciento, las tarifas de alta tensión o uso industrial tendrán un ajuste automático de 6.6 por ciento y las de media tensión para uso comercial registrarán una alza de 4.8 por ciento.

En tanto las tarifas domésticas de medio y bajo consumo, que integra 98 por ciento de las tarifas residenciales, tendrán un ajuste de 0.327 por ciento mensual para acumular una alza en el año de 3.92 por ciento con el fin de compensar únicamente la inflación prevista y no permitir su deterioro en términos reales, explicó la Secretaría de Hacienda.

Los expertos del grupo financiero Santander reiteraron su advertencia sobre el comportamiento de los precios de los energéticos y el de los precios internacionales de insumos industriales y productos agropecuarios, que constituyen los principales elementos de riesgo para la inflación durante 2011.