Jaguares sufrió la expulsión del colombiano Jackson Martínez
Domingo 16 de enero de 2011, p. a11
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 15 de enero. El uruguayo Nicolás Olivera había pasado inadvertido durante todo el partido, hasta que al minuto 93 anotó un golazo en un disparo de media distancia que dio el empate 2-2 al América ante Jaguares y le devolvió el alma al cuerpo al técnico Manuel Lapuente.
El timonel estaba sumido en su butaca, en lo que parecía ser la segunda derrota de su equipo en este inicio de torneo, pero el primer tanto del refuerzo americanista lo levantó en vilo, pues significó el primer punto de las Águilas en el grupo dos.
Jaguares, que inició la campaña con una victoria, desperdició dos veces su ventaja en el marcador y suma cuatro unidades en el bloque tres.
El equipo de José Cruz tuvo el dominio en los minutos iniciales y lo reflejó en el marcador hasta el 29, en un desborde de Jackson Martínez por la banda izquierda y, ante floja marca de Aquivaldo Mosquera, mandó un centro potente que Guillermo Ochoa no pudo detener por salir mal y en el área chica Christian Valdez impactó con parte interna y de volea para el 1-0.
Los amarillos reaccionaron cinco minutos después, en un córner que Israel Martínez peinó a primer palo, pero el balón pasó cerca del travesaño de la portería defendida por Jorge Villalpando.
Sin los creativos Vicente Sánchez, lesionado, y Daniel Montenegro, en la banca, América fue una nulidad al ataque y se limitó a dar pases laterales.
El panorama cambió en el complemento con el ingreso del Rolfi. El árbitro Julio Escobar marcó penal al 55, por una carga de Miguel Martínez sobre Montenegro. Convirtió Matías Vuoso con disparo colocado a la derecha de Villalpando.
El gusto visitante sólo duró nueve minutos, ya que Chiapas recobró la ventaja al 64, en un centro medido de Damián Manso al área, donde Óscar Razo remató con la cabeza.
El panorama jaguar empezó a descomponerse a 10 minutos del final, con la expulsión del colombiano Martínez al recibir la segunda amarilla. América atacó con más entusiasmo que orden y se acercó en un centro de Enrique Esqueda que se estrelló en el travesaño.
Ya en tiempo añadido, en jugada en la media luna, Daniel Márquez tocó con la cabeza a Olivera, quien mandó un tiro que penetró la valla por el ángulo superior izquierdo, para alegría de los fanáticos que pintaron de amarillo algunas partes del repleto estadio Víctor Manuel Reyna.