Son enfermedades, como el alcoholismo, pero con impacto económico más grave, dice Gurría
Ocupa el país segundo lugar en adultos con dichos padecimientos alimentarios, y el primero en niños
Viernes 14 de enero de 2011, p. 40
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, advirtió que el alto nivel de obesidad y sobrepeso que existe en México pone en peligro la esperanza de vida de las actuales generaciones, el futuro del país y la estabilidad de sus finanzas públicas.
Al participar en las conferencias Los retos de la salud en México, organizadas por la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), criticó a los lobistas
(cabilderos) de la industria alimentaria trasnacional que señalan que el consumo de alimentos con alto nivel calórico es una opción de vida
, cuando para la medicina, obesidad y sobrepeso son enfermedades, como el alcoholismo y la drogadicción, y, probablemente, desde el punto de vista del impacto económico, sea mucho más grave
.
Indicó que México ocupa el segundo lugar de personas adultas en esa condición, ya que la padecen tres de cada 10. Pero lo más sobrecogedor
–dijo–, es que en obesidad infantil se sitúa en el primer escaño de las naciones que conforman este organismo, pues uno de cada tres niños mexicanos tiene sobrepeso o es obeso.
Señaló que la diabetes es la consecuencia más común y directa de la obesidad, y en México va en aumento, ya que 11 por ciento de la población de 20 a 79 años la tiene, lo que representa uno de los índices más elevados entre las naciones que integran la OCDE.
En el auditorio Raoul Fournier de la Facultad de Medicina, el representante del organismo internacional consideró que es momento de combatir esta problemática desde varios frentes.
En la OCDE hemos demostrado que una inversión de 5 dólares anuales por persona podría sufragar cuatro medidas eficaces: una campaña de promoción de la salud en los medios, un programa de etiquetado alimentario obligatorio, una normativa sobre publicidad alimentaria para niños y medidas fiscales consistentes en combinación de impuestos y subvenciones que castigue lo negativo y promueva lo positivo.
De invertir ese dinero –señaló–, podrían evitarse hasta 55 mil muertes al año en el país. Cinco dólares por persona es una cantidad asequible, cuando actualmente México gasta 600 dólares al año por persona en asistencia médica
.
Al referirse a la cobertura, subrayó que junto con Turquía y Estados Unidos, nuestro país es uno de los tres de la OCDE que no han logrado aún una cobertura universal de salud, pues apenas alcanza 89 por ciento.
Asimismo, aplaudió el programa del Seguro Popular; consideró que su aplicación el próximo año México podría conseguir la cobertura total, aunque ese es un primer paso
para proporcionar asistencia médica de calidad y asequible.
Una salud precaria conlleva al empobrecimiento económico. En los hogares mexicanos se gasta por servicios complementarios de salud 4.5 por ciento del ingreso, lo que representa 50 por ciento más del promedio de la OCDE. Y si se trata de gastos catastróficos
, el desembolso es 40 por ciento mayor, cifra que es la segunda más alta entre los miembros del organismo internacional, sólo después de Corea.