Viernes 14 de enero de 2011, p. 30
Moscú, 13 de enero. La Unión Europea dio un paso importante en su afán de encontrar alternativas energéticas al firmar este jueves con Azerbaiyán un acuerdo que amarra el compromiso del país caucásico de suministrarle gas natural a largo plazo.
En este momento, una cuarta parte del combustible que se consume en Europa es importado desde Rusia –y el 80 por ciento de éste llega a través de los gasoductos que cruzan el territorio de Ucrania–, lo cual supone un riesgo que los 27 quieren reducir para evitar que las disputas comerciales y/o los vaivenes políticos ruso-ucranianos vuelvan a afectar los suministros a clientes europeos.
El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, emitió hoy en Bakú, la capital azerbaiyana, una declaración conjunta con el presidente Ilham Aliyev. Durante un largo plazo, aún por precisar, Azerbaiyán abastecerá con grandes cantidades de gas a Europa.
“Se trata de un gran avance. Este acuerdo confirma el acceso directo de Europa al gas de la cuenca del Caspio, lo que permitirá concluir el tendido del Corredor Sur “, subrayó Barroso.
Corredor Sur
El Corredor Sur deberá configurarse con la construcción de varios gasoductos como Nabucco, ITGI, White Stream y TAP, cuya finalidad será llevar el gas a Europa eludiendo el territorio de Rusia.
Barroso viajó a Azerbaiyán con el comisario de Energía, Gunther Oettinger, quien destacó que el acuerdo se corresponde con la intención de la Unión Europea de buscar nuevos países suministradores.
Azerbaiyán –que este año tiene previsto producir 30 mil millones de metros cúbicos de gas, cantidad que en siete años se propone aumentar a 80 mil millones– es considerado, junto con Turkmenistán, uno de los principales suministradores del gasoducto Nabucco.
Éste se concibió como continuación del gasoducto Bakú-Tbilisi-Erzurum, y desde Turquía, a través de los Balcanes, alcanzaría Austria y Alemania con una capacidad de hasta 30 mil millones de metros cúbicos anuales.
Barroso visitará también el centroasiático Turkmenistán, el otro país de la región del Caspio que se ha comprometido a proporcionar gas al proyecto Nabucco evitando territorio ruso.
El Nabucco, que el Kremlin considera un proyecto politizado
, se presenta como competidor del South Stream, gasoducto que impulsa el consorcio ruso Gazprom del puerto de Novorrosisk, vía el fondo del Mar Negro, hasta Bulgaria, Balcanes y, de ahí, a Austria e Italia, con una capacidad anual de 63 mil millones de metros cúbicos.