Seattle, 8 de enero. Los Halcones Marinos de Seattle desplegaron sus mejores armas y dieron la sorpresa en la postemporada al eliminar al monarca defensor de la NFL, Santos de Nueva Orleáns, que cayó 41-36, para la alegría de su afición en el Qwest Field.

El triunfo de Seattle, convertido en la Cenicienta de la liga por la forma negativa en la que clasificó a playoffs (7-9), tras ganar la división Oeste de la Conferencia Nacional, la peor de su sector, sorprendió esta tarde, gracias en gran parte a la conducción de su mariscal de campo Matt Hasselbeck, lugar número 21, quien ganó el duelo a su colega Drew Brees, tercero de la liga.

Hasselbeck aportó cuatro envíos de anotación, de los 22 pases completos en 35 intentos, y tuvo una ganancia de 272 yardas, en tanto que Brees se quedó con 39 de 60 lanzamientos para una ganancia de 404 yardas y un par hacia la zona prometida.

Los Santos se fueron arriba con un gol de campo de Garrett Hartley, de 26 yardas y luego la anotación de Heath Evans (10-0). Vino la respuesta ofensiva de Seattle, con el touchdown del ala cerrada John Carlson y el extra de Olindo Mare, para dejar el marcador 10-7.

En el segundo cuarto, Hasselbeck condujo con inteligencia a su ejército con varios misiles y nuevamente se conectó con Carlson para acortar la distancia (14-17) con el equipo de la ciudad del Jazz.

Los miles de espectadores despidieron con aplausos a su veterano pasador, luego de apuntarse el tercer tiro perfecto, ahora con Brandon Stokley, y su escuadra se fue al descanso con ventaja de 24-20, pese a los esfuerzos de Brees en su intento por empatar el encuentro, que sólo tuvo respuesta con el gol de campo de su pateador Hartley, de 22 yardas.

El cuarto timbrazo de Seattle cimbró el Qwest Field, luego de que el cuadro local salió más decidido que nunca para destronar al campeón, cuando Hasselbeck envió el ovoide a Mike Williams (38 yardas) y cruzó la zona prometida (31-20).

Mare aportó tres puntos más con otra certera patada, de 39 yardas, que pasó sin problemas los tres postes (34-20), pero los Santos despertaron ante los desesperados esfuerzos de su corredor Reggie Bush por devorar las yardas para acercarse a la zona enemiga.

Para el cuarto episodio, los Santos rompieron la barrera local y junto con Brees no daban crédito de verse superados por un débil adversario, que este día realizó su mejor encuentro, tras cerrar con números rojos la temporada regular.

Nueva Orleáns comenzó a ganar terreno con su enjudioso mariscal de campo, pero fue por la vía terrestre donde tuvo que desplegar toda su fuerza para acechar a Seattle, con las anotaciones de Julius Jones (4 yardas) y el pateador Hartley (21 yardas) para dejar la pizarra 34-30.

A casi cinco minutos del final, Seattle puso en jaque la corona de Santos, luego de que Marshawn Lynch, en una espectacular carrera de 67 yardas, dio la estocada final (41-30) y despidió a un monarca en postemporada, algo que no sucedía desde hace 10 años, cuando Nueva Orleáns dejó fuera a Carneros de San Luis.

Santos, con 1.30 minutos en el reloj, consiguió acercarse por tierra con Devery Henderson (41-36), y aunque intentó la conversión de dos puntos, fracasó.

Este domingo continuará el juego entre comodines en la Americana, con el partido entre Cuervos de Baltimore y Kansas, mientras en la NFC se medirán Empacadores de Green Bay y Águilas de Filadelfia.