Domingo 2 de enero de 2011, p. 25
Aguascalientes, Ags., 1º. de enero. Al menos cuatro de los 11 alcaldes que tomaron posesión los días 30 y 31 de diciembre en Aguascalientes –nueve del PRI y dos del Partido Nueva Alianza– hallaron las arcas vacías o recibieron cuentas con endeudamientos y presuntos desvíos.
En Tepezalá, el neoaliancista Jesús Santillán pidó al gobierno y la contraloría estatales intervenir e investigar las presuntas anomalías en el manejo de la hacienda pública de su antecesor panista, Cándido Loza, cuyas cuentas públicas de 2009 y 2010 no aprobó su propio cabildo por desvíos en beneficio de familiares
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Loza compró en casi 400 mil pesos una camioneta modelo 2010 que se llevó su pariente y ex secretario del ayuntamiento Aarón Rodríguez Herrera. Además, tuvo observaciones
por 9.5 millones de pesos que incluyen préstamos de hasta 180 mil pesos no devueltos por funcionarios y regidores.
A su vez Gabriel Arellano Espinosa, ex alcalde capitalino y actual coordinador de la banca priísta en el Congreso local, fue denunciado ante las procuradurías de Justicia estatal y General de la República por comprar un software de 25.5 millones de pesos y sobrefacturar un helicóptero en más de 54 millones.
En el municipio de Jesús María el saliente alcalde priísta Arturo Piña Alvarado se quedó sin dinero para liquidar conforme a la ley a decenas de empleados; mientras en San José de Gracia el panista Armando Rodríguez Domínguez no pagó aguinaldos a unos 200 trabajadores.