El senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Tomás Torres propuso reformar el artículo 102 de la Constitución para dotar de autonomía técnica, de gestión, personalidad y patrimonio propio al Ministerio Público, con el objetivo de dar a la Procuraduría General de la República (PGR) más fortaleza y capacidad de acción para garantizar una efectiva impartición de justicia y combatir la impunidad que hoy prevalece en el país.

El perredista aseguró que ante el clima de violencia e inseguridad que se enfrenta en México, es necesario robustecer a las instituciones encargadas de la procuración de justicia, ya que se encuentran rebasadas por las circunstancias actuales y en ellas priva la ineficiencia, el rezago en la atención de los asuntos y la discrecionalidad, además, enfatizó que la PGR percibida por la población como una dependencia que atropella, extorsiona y es parcial en su actuación”.

Por ello, expuso el senador, se presentó la iniciativa para reformar el artículo 102 constitucional, lo que es un paso necesario para asegurar la fortaleza y capacidad de la PGR, para que pueda realizar su labor con imparcialidad y eficiencia, apartada de decisiones políticas o partidistas que nada tienen que ver con la aspiración de justicia de los ciudadanos.

El perredista detalló que en su propuesta plantea que el Ministerio Público sea presidido por un procurador general de la República, elegido por el voto de las dos terceras partes de los miembros del Senado, o en su caso, de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, de entre una terna de aspirantes que propondrá la comisión ordinaria senatorial encargada de esta tarea.

En su propuesta, el senador del PRD indica que para elegir la terna de aspirantes a titular de la PGR, los legisladores deberán realizar una amplia consulta con instituciones académicas y organizaciones repre- sentativas de la sociedad civil, y el cargo será por cuatro años, y podrá ser relecto una sola vez.

Torres subrayó que la autonomía constitucional no es suficiente para asegurar el profesionalismo y la eficacia del Ministerio Público, ya que en México los agentes son ubicados y removidos de forma arbitraria, carecen de salarios dignos y de oportunidades de especialización, lo cual limita su desempeño.