Una semana después de haber admitido que sí habría aumento en el precio de la tortilla, aunque no de la magnitud que anunció el domingo 12 la Unión Nacional de Industriales de Molinos y Tortillerías, el secretario de Economía, Bruno Ferrari, realizó un recorrido por establecimientos del Distrito Federal en el que corroboró que el precio del alimento subió luego del anuncio.

Sostuvo que la cotización promedio en la zona centro pasó de 8.65 pesos a 8.70 por kilo, mientras que a nivel nacional el promedio está en 9 pesos con 96 centavos, cuando antes del anuncio de los tortilleros la cotización nacional era de 9.88.

No obstante, explicó que cuando los precios suben, la dependencia demanda que se le notifique inmediatamente y realiza una verificación para inspeccionar las facturas y los insumos para de ese modo saber quién está subiendo los precios.

No nada más son las tortillerías sino quienes venden los insumos, si es que se los están vendiendo más caros. No se trata de castigar específicamente a las tortillerías, sino a quien está subiendo los precios injustificadamente. Si los insumos están subiendo injustificadamente habrá que ver quién los está subiendo, señaló.

Ferrari, quien durante el operativo estuvo acompañado por el procurador general del consumidor, Antonio Morales de la Peña, recordó que este lunes la Comisión Federal de Competencia (Cofeco) inició una investigación sobre prácticas de colusión en el mercado de la tortilla.

Destacó que tales prácticas crean nerviosismo en el mercado y hacen que suba sin justificación un producto importante en la mesa de los mexicanos como es la tortilla.

Existen presiones internacionales (pero) el hecho de que haya subido el precio internacional no quiere decir que puedan ellos unilateralmente declarar un aumento de precio de ese tamaño, porque eso aterroriza al consumidor mexicano, y eso no podemos permitirlo. Hay que ver cuáles son las causas de esto.

El titular de la dependencia indicó que la Secretaría de Agricultura ha estado trabajando en programas de agricultura por contrato, a través de los cuales se garantizan los precios de los insumos, por lo que el abasto está garantizado a una cotización estable para cubrir hasta el tercer trimestre del año próximo.

En los casos en que nos demuestren con facturas, que han recibido aumentos de este tipo, entonces no son las tortillerías. Las tortillerías, nosotros veremos cuáles son las sanciones en caso de que proceda, y si ellos se justifican, de acuerdo con los precios a los que se ha vendido, nosotros nos iremos a ver a los que les venden los insumos y sancionarlos en su momento, advirtió.

El funcionario visitó la colonia Carmen Serdán, de la delegación Coyoacán, donde supervisó la operación de las tortillerías Lupita y Don Juan, que operan con recursos del programa Mi Tortilla, de la SE.

El subsecretario para la pequeña y mediana empresa, Miguel Marón, informó que al 20 de diciembre se han destinado 274 millones de pesos –204 para financiamiento y 70 para capacitación y consultoría– en apoyos a dichos establecimientos.

Lo anterior, dijo, permitirá cerrar este año con 5 mil tortillerías capacitadas, 2 mil con la incorporación de equipos eficientes en el uso de energía, y alrededor de mil con cambio en su imagen.

Informó que los establecimientos apoyados por Mi Tortilla han reducido 28 por ciento el consumo de gas; 26 por ciento de luz; 32 por ciento ha contratado a más empleados, y 44 por ciento ha visto incrementada su ganancia.