Sociedad y Justicia
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Los límites sólo están en el corazón y la cabeza
 
Periódico La Jornada
Martes 21 de diciembre de 2010, p. 41

Berta Martínez Sebastián es una joven indígena partera, cuya labor por revalorizar los conocimientos ancestrales del alumbramiento y la medicina tradicional, le mereció el Premio Nacional de la Juventud.

Sabedora de que no tendría muchas oportunidades para hacerlo, aprovechó el marco de la ceremonia encabezada por el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Alonso Lujambio, para entregarle una carta dirigida a él y al presidente Felipe Calderón Hinojosa.

Sin que la entrega de la misiva fuera evidente a los ojos del público, Berta le escribe al Ejecutivo que espera que el apoyo a los jóvenes premiados no sea sólo por este día ya que es necesario que sea constante para poder terminar los estudios.

Y le exige a Calderón dar trabajo a los integrantes de este sector: Falta mucho por hacer en las comunidades, además de los servicios adecuados de salud para las mujeres y los jóvenes; faltan oportunidades de empleo para que no migren, ése es un gran reto.

Berta tiene hoy 18 años. Pero a los 12, sin importarle que la convocatoria para aprender partería establecía como requisito tener los 16, decidió que tendría que estudiar en el taller de la Asociación Nueve Lunas a como diera lugar.

No le importó que cada mes debía caminar más de cuatro horas desde su pueblo –ubicado en Santa María Alotepec– hasta la ciudad de Oaxaca.

La primera vez que ayudó a un bebé a entrar a este mundo sintió mucho miedo. Qué tal que iba a pasar algo feo. Pero cuando nació se me fue todo.

A la fecha ha atendido más de 40 partos en su comunidad, lo que le ha merecido el reconocimiento y la confianza de las mujeres, además de desempeñarse como traductora. También promueve los derechos sexuales reproductivos, es acupunturista y estudia el bachillerato.

Berta dice: Todas estas experiencias han despertado en mí el interés por aprender lo mejor de cada una de las formas de curar, tal vez los límites estén en la cabeza y el corazón de las personas, por eso me interesa seguir estudiando la medicina en sus diferentes formas.