De visita en Saltillo, el Presidente no hace ninguna mención sobre el mandatario local
nos seguiremos viendo
El inminente dirigente del PRI agradece a la Federación el trato dado a Coahuila
Sábado 18 de diciembre de 2010, p. 14
Saltillo, Coah., 17 de diciembre. Sonriente, se diría que de buen humor, el gobernador Humberto Moreira se despidió, en su calidad de funcionario, del presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Quiero decirle, señor Presidente que, salvo que usted quiera venir a pasar la Navidad acá con nosotros, ésta será la última vez que lo reciba como gobernador. Me retiraré del gobierno del estado en los primeros días de enero, pero nos seguiremos viendo, señor Presidente, muchas veces.
Con la inauguración del hospital general de Saltillo como razón del encuentro, consciente de que Moreira se convertirá en presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la frase del todavía gobernador no arrancó ni una sonrisa a Calderón, ni siquiera una mueca. Serio –se diría que demasiado– escuchó el discurso del mandatario coahuilense.
El titular del Ejecutivo federal optó por mantenerse inmerso en su enésimo discurso sobre el rumbo de la política en materia de salud y enfatizar el vertiginoso crecimiento de la infraestructura hospitalaria, que en pocas semanas pasó de 2 mil 10 obras de construcción y remodelación a 2 mil 114, según el último parte dado por Calderón este viernes.
Ni una sola mención a Moreira. Muy lejos su actitud respecto de la que tuvo apenas el lunes pasado con el gobernador saliente de Tamaulipas, Eugenio Hernández –priísta como Moreira–, con quien bromeó en torno al final de mandato.
La despedida de Moreira no mereció ningún comentario a Calderón. Es más, a la hora de inaugurar el hospital, el Presidente fue enfático en destacar la participación mayoritaria del gobierno federal en la inversión en el nuevo nosocomio, que sumó 340 millones de pesos.
El Ejecutivo federal insistió en destacar la obra gubernamental para construir, según la última cifra, 2 mil 114 obras de infraestructura hospitalaria, entre nuevas instalaciones y remodelaciones, la mayor, volvió a decir, que se haya realizado en la historia.
Mencionó que de manera colateral esa inversión ha generado 82 mil fuentes de empleo para los médicos y las enfermeras que laboran en los nuevos hospitales.
Cifras que se mueven con velocidad de vértigo, de acuerdo con los datos del Presidente, quien lanzó a manera de muestra: Tan sólo este año (la cobertura del Seguro Popular pasó) como de 30 millones a 42 millones de familias (sic). Este año nada más. Para darles una idea. Hace algunos años, todavía hasta 2004, 2005, cuando empezó el Seguro Popular, había en el país más o menos 47 millones de mexicanos con servicio médico, con seguridad social
.
Según su contabilidad de las obras en materia de salud, éstas pasaron de 2 mil 10 apenas en noviembre a las 2 mil 114 que citó este viernes en Saltillo.
Poco antes de los números ofrecidas por Calderón, Moreira citó cifras para exaltar su gestión en materia de abatimiento de la pobreza, de la construcción de carreteras y hospitales, para concluir agradeciendo al gobierno federal el trato recibido.
El casi seguro líder del priísmo nacional agradeció el trato de la Secretaría de Salud para la entidad. Recordó que está en marcha la construcción de un nuevo distribuidor vial, que calificó como el más grande de México, e insistió en que la pobreza se ha abatido en la entidad.
En medio de esa danza de cifras, anticipó a Calderón que se retirará del cargo en los primeros días de enero y sugirió que se inaugurara el distribuidor vial antes de su salida. No hubo respuesta presidencial.
Antes de estos mensajes involuntarios del futuro político inmediato, habló el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, sobre el avance en la materia durante esta administración.
Los datos que proporcionó señalan que en 2011 el incremento en el financiamiento crecería 10.9 por ciento en el IMSS, 12 en el ISSSTE y 12.6 en la Secretaría de Salud respecto a 2010.
Aseguró que 85 por ciento de esos recursos serán ejercidos por los sistemas estatales de salud, lo que supondrá una mayor capacidad de respuesta de las instituciones del sector.