Ante el Parlamento, el vicepresidente denuncia insuficiencias
Jueves 16 de diciembre de 2010, p. 31
La Habana, 15 de diciembre. El principal operador de la reforma económica cubana, el vicepresidente Marino Murillo, se quejó este miércoles ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP, Parlamento) que la isla perdió recursos este año por falta de previsión en las inversiones y en la producción de bienes exportables.
Murillo, quien también es ministro de Economía y Planificación, abrió la segunda sesión del año del Parlamento, que encabezó el presidente Raúl Castro. Contra la costumbre, los periodistas extranjeros no tuvieron acceso a la apertura de los trabajos.
No queda claro todavía cuántos días durará la sesión, en la que está previsto que se discutan un aumento de impuestos y el Proyecto de Lineamientos de Política Económica y Social, documento principal de la reforma y del próximo sexto Congreso del Partido Comunista de Cuba.
Murillo entregó a los diputados en privado los datos de la economía cubana de 2010. La televisión transmitió su presentación de un power point al plenario. Su balance fue de que el año concluyó en términos globales con un resultado favorable
, pero todavía con insuficiencias
.
El vicepresidente apuntó en particular que una baja producción de níquel y de azúcar impidió al país aprovechar el alza de los precios internacionales de esos productos, lo que se tradujo en una pérdida de unos 160 millones de dólares.
Podremos tener mucha administración de divisas, mucha renegociación de la deuda, pero si no cumplimos con los ingresos, la posibilidad de poder seguir administrando eso van a seguir siendo limitadas
, deploró el funcionario.
También criticó que la falta de disciplina, organización y preparación
haya impedido ejecutar inversiones que cumplían con el perfil acordado por el gobierno: sólo las que reportan ingresos a corto plazo y pueden pagarse con sus propios rendimientos.
Hay mucha improvisación
en ese terreno, subrayó Murillo. Tenemos que hacer una crítica a todo el mundo y en particular a nosotros (el Ministerio de Economía) por el poco rigor que tiene hoy en Cuba el proceso inversionista
.
Entre los resultados positivos, Murillo anotó el equilibrio financiero interno, con un control de la liquidez en manos de la población y con un aumento de la productividad (4.2 por ciento) muy cercano al crecimiento del salario medio (4.4 por ciento).
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) reportó, a su vez, que por segundo año consecutivo se redujeron drásticamente el gasto y las importaciones en la isla, para mejorar las finanzas públicas, con lo cual el déficit fiscal llegará en 2010 a 3.4 por ciento del producto interno bruto, frente a 6.9 en 2008 y 4.8 en 2009.
Pero la inversión volvió a caer, el consumo fue bajo, la inflación repuntó (1.4 por ciento) y la restricción en las compras externas continúa limitando seriamente el ritmo
de crecimiento, que la entidad ubicó en 1.9 por ciento (1.4 el año anterior), impulsado por la exportación de bienes y servicios.