Crece la sospecha de que la transacción fue muy turbia
Miércoles 8 de diciembre de 2010, p. 32
Grupo Iusacell señaló que es indispensable que la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) dé a conocer el informe que le entregó Transparencia Mexicana sobre las condiciones en que se realizó la licitación 21 y poner en claro la forma en que se entregaron 30 megahercios (Mhz) de cobertura nacional a Televisa-Nextel.
“Ha trascendido que la tardanza en hacer público el informe del Pacto de Integridad que Transparencia Mexicana suscribió con la Cofetel para la licitación 21, se debe a que el equipo de Mony de Swaan está intentando rasurar el documento por tantas irregularidades que reporta”.
Este reclamo de Grupo Iusacell se suma a la serie de litigios presentados en contra de la licitación 21, que ahora se encuentra en un momento importante debido a que el juzgado decimosexto de distrito de Córdoba, Veracruz, encontró responsable al secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan Molinar Horcasitas, de haber violado una suspensión al entregar el título de concesión a Televisa-Nextel, y que de permitir el uso de esa concesión incurriría en una responsabilidad mayúscula.
Grupo Iusacell aseguró que cada día que pasa sin que la Cofetel difunda el informe que el testigo social de Transparencia Mexicana elaboró sobre la forma en que se llevó a cabo la licitación 21, crece la sospecha de que el órgano regulador y la SCT entregaron a Nextel parte del patrimonio nacional en una transacción más turbia de lo que parece
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Señaló que las irregularidades en el proceso empezaron desde el diseño de las bases de licitación en las que la SCT y Cofetel dieron todas las ventajas a la entonces alianza Televisa-Nextel, y luego la forma en que sobre los intereses de la nación, incluso violando la ley, Mony de Swaan y Juan Molinar Horcasitas se empeñan en que ahora Nextel explote solo el espectro radioeléctrico y hacen evidente que, más que necedad hay intereses que los impulsan a actuar así
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Hasta ahora la SCT y Cofetel sostienen que la licitación 21 se apegó a la ley, por lo que no se puede reponer el proceso, pero cuando el concurso estaba en vías señalaron que tampoco podían detenerlo y repetirlo porque representaría un atraso de por lo menos cinco años para el desarrollo de nueva infraestructura de telecomunicaciones, lo que iría en contra del beneficio de los consumidores.
Sin embargo, a dos meses de que la SCT entregó a Nextel el título de concesión, la licitación 21 sigue siendo impugnada por Grupo Iusacell, pero también por especialistas en telecomunicaciones, quienes han advertido que la Cofetel no puede hacer otra licitación hasta que se aclare lo que ocurrió en la 21. Legisladores emitieron un exhorto para que el Poder Ejecutivo retire el título de concesión a Nextel y reponga todo el proceso de la licitación 21.