Puebla, 5 de diciembre. Salomón Jauli Dávila, quien era director del Instituto Poblano del Deporte (Inpode), se suicidó en su casa, dos semanas después del fallecimiento de su hijo del mismo nombre, que estudiaba en Vancouver, Canadá.

Quien fue el primer mexicano en cruzar a nado el Estrecho de Bering fue encontrado sin vida en su habitación, tras darse un tiro en la cabeza, informó la Procuraduría General de Justicia del estado.

Familiares del servidor público y amigos manifestaron que Jauli Dávila, de 62 años de edad, cayó en una depresión profunda tras el deceso de su primogénito, al punto de que se encerró en su casa y evitó cualquier contacto y visita.

El funcionario estatal había retornado el miércoles de Canadá, luego de los funerales de su hijo Salomón, de 22 años, quien murió en un accidente automovilístico, el 17 de noviembre.

Durante su administración al frente del deporte poblano, que comenzó en el mandato de Manuel Bartlett Díaz, en 1993, Jauli Dávila impulsó la construcción de 22 pistas de tartán, 19 campos de futbol sintético y cinco de beisbol, 54 canchas de usos múltiples, un frontón, una alberca y la construcción de la Villa Olímpica, esta última como Centro de Alto Rendimiento, inaugurada hace un par de meses.

Como diputado federal priísta presidió la Comisión del Deporte en 1996 e impulsó la ley federal de la rama. En ese año cruzó el Canal de la Mancha y en 1999 el Estrecho de Bering, entre otras proezas en la natación de aguas abiertas, además de crear los maratones de esta ciudad.

“Cruzar el estrecho de Bering fue una aventura. Perdí todos los dientes, estuve en peligro de ser mordido por una orca sin darme cuenta. Y luego, al llegar a Rusia, me iban a encarcelar porque no tenía visa (…) Ser el primer mexicano que lo cruza nadie me lo quita, me podrían quitar mi casa, pero nadie me quita ese honor”, había declarado en una entrevista al portal La Quintacolumna.

A Salomón Jauli, le sobreviven su esposa Lorena Aguirre y sus hijos Isaac y Abraham.