Estocolmo, 2 de diciembre. El Tribunal Supremo de Suecia rechazó hoy el recurso de apelación interpuesto por el fundador del portal de Internet Wikileaks, Julian Assange, contra la orden de arresto en su contra por supuesta violación y acoso sexual.

La fiscalía de Estocolmo ordenó la detención de Assange antes de que Wikileaks comenzara a difundir más de un cuarto de millón de documentos confidenciales de diplomáticos estadunidenses.

Assange, 39 años, está acusado en Suecia de haber violado o acosado sexualmente a dos mujeres durante cinco encuentros en agosto pasado. Se desconoce su paradero.

De manera similar a la que Estados Unidos usa para englobar a sus detractores extranjeros como enemigos de la democracia, Washington definió a Assange como un antiestadunidense cuyo único interés es perjudicar a la nación y su labor benéfica en política exterior.

No es un periodista ni un infiltrado, afirmó el portavoz del Departamento de Estado, P. J. Crowley. Tiene una agenda política. Quiere socavar el sistema internacional que nos permite cooperar y colaborar con otros gobiernos y trabajar en escenarios multilaterales sobre una base bilateral para ayudar a resolver temas regionales e internacionales, agregó Crowley.

Assange, de nacionalidad australiana, rechaza las acusaciones y asegura que es víctima de una conspiración de Estados Unidos. Su abogado en Suecia, Bjorn Hurting, declaró este jueves: Apenas puede entender las enormes proporciones que ha alcanzado este procedimiento en relación con los hechos. Además, señaló que en caso de que su cliente sea detenido, se opondrá a que sea extraditado a Suecia.

Sobre Assange también pesa una orden internacional de búsqueda emitida por la Interpol. Un portavoz de la policía en Estocolmo confirmó hoy una información del diario británico Times, según la cual para que entre en vigor la orden internacional de captura hace falta que la fiscalía sueca aporte nuevos documentos. En un primer formulario faltó señalar la pena máxima que alcanzaría al australiano por los delitos que se le atribuyen, dijo el jefe de la superintendencia, Tommy Kangasvieri.

La fiscal general, Marianne Ny, anunció que realizará un trámite inmediato y dijo que espera la detención de Assange lo más pronto posible para concluir las investigaciones.

Times indicó que el fundador del portal, que tiene su base en Suecia, se encuentra desde octubre en Reino Unido y que informó a Scotland Yard de su llegada al país; incluso proporcionó sus datos de contacto. Por errores formales, la policía británica no pudo emitir una orden de expulsión en su contra. Scotland Yard se abstuvo de comentar la versión del Times.

Tanto la policía como las autoridades suecas y británicas sabían dónde estaba Assange, dijo su abogado en Londres, Mark Stephens, citado por el diario. Pero no intentaron detenerlo entonces, quizá porque se dieron cuenta del error formal que cometieron. Ahora, Assange se esconde porque recibió amenazas de muerte.

No tenemos ni idea de lo que está ocurriendo y estaría bien que alguien nos lo explicara, señaló Stephens. Assange solicitó permiso para abandonar Suecia y se lo concedieron. Desde entonces, en varias ocasiones pidió reunirse con la fiscal general sueca, Marianne Ny, peticiones que fueron ignoradas o negadas.

En lugar de ello, Ny emitió una orden de captura en su contra, sin comunicárselo ni presentar pruebas. El abogado no entiende por qué la Interpol puso a su cliente en el nivel máximo de búsqueda, cuando él ofreció dialogar en reiteradas ocasiones.

Stephens indicó este jueves que Assange desea conversar con las autoridades suecas, pero no dijo dónde se encuentra.

No hay una orden de arresto contra él. Hubo un aviso rojo de la Interpol, que no es una orden de detención, alertando a las autoridades que vigilen sus movimientos, añadió Stephens. La orden de arresto fue enviada de vuelta por Scotland Yard, porque no se ajustaba a la ley y era defectuosa. Agregó que en toda Europa no existe una orden de detención válida contra su representado.

Assange pasa gran parte del tiempo en Suecia y a principios de este año fue acusado de conducta sexual inapropiada por dos suecas. Fiscales de ese país abrieron, abandonaron y reabrieron una investigación sobre las acusaciones.

Estamos en esta posición en la que no se nos ha dicho qué acusaciones hay en su contra, sólo sabemos que una vez se le solicitó que fuera testigo, declaró.

Stephens dijo que Assange deseaba reunirse con fiscales suecos, pero que ellos no quisieron verlo.

Estamos en una situación muy surrealista en este momento, es como un cuento de hadas sueco, manifestó.

El editorialista del diario The Independent, Jerome Taylor, afirmó en un comentario que se publicará este viernes que de la misma forma en que la red Al Qaeda no desaparecería en caso de que Estados Unidos capturara a su líder, Osama Bin Laden, WikiLeaks no se terminará por enviar a Assange a prisión.

El analista sostiene que lo que Estados Unidos no entiende es que el activista cibernético no creó una red en sí, sino que llegó a una idea que será copiada y replicada por miles en la web, una entidad que ya es imposible destruir.