La Habana, 1º de diciembre. El Partido Comunista de Cuba (PCC) comenzó oficialmente este miércoles entre sus filas la discusión de la reforma económica, pero algunos intelectuales ya anticiparon que uno de los temas álgidos será el de los límites del Estado.

Espero que logremos un Estado que se autolímite en sus funciones y permita a la sociedad que se desarrolle, dijo Alfredo Guevara, veterano del movimiento revolucionario de hace medio siglo, uno de los más activos polemistas desde entonces y ahora presidente del festival internacional de cine.

“El fenómeno más interesante que se está produciendo en este momento (…) es la desestatización de la sociedad”, agregó Guevara, en una conferencia de prensa. Si la sociedad en profundidad se desestatiza, es que la sociedad alcanza un nivel de independencia y madurez, lo cual sería un gran aporte de la revolución cubana.

El sociólogo, académico y diplomático Aurelio Alonso, subdirector de la revista de la Casa de las Américas, expuso en un seminario que Cuba carece de “un modelo socialista viable de desarrollo, porque el modelo soviético, que identificaba la socialización con la propiedad estatal (y otras cosas), contraponía plan y mercado, consagraba el ejercicio del voluntarismo en la planificación económica, configuraba una nueva burocracia, y desestimulaba el trabajo. (…) Es ahora que en Cuba se plantean los cambios que pueden llevar al sistema a la configuración de un socialismo viable”.

La crítica de arte Graziela Pogolotti, presidenta de la Fundación Alejo Carpentier, puso los reflectores sobre el impacto del recorte presupuestal en la cultura. Su creación y su distribución no pueden abandonarse a la anarquía mercantilista, escribió la ensayista en la revista digital La Jiribilla. Aun en las circunstancias económicas más difíciles, la conducción de estos procesos requerirá preservar estrategias de subvención sabiamente administradas.

Subvenciones e impuestos

La discusión se basa en los Lineamientos de Política Económica y Social, único punto del sexto congreso del PCC, que sesionará en abril próximo. El documento prevé reducir los subsidios a su mínima expresión; elevar los impuestos; vincular los salarios con el rendimiento; exigir rentabilidad a las empresas públicas, eliminando el control del gobierno; ampliar las cooperativas, las microempresas, el autoempleo y el negocio inmobiliario, entre otras metas. Como parte de ese giro, más de medio millón de empleados serán despedidos antes de marzo.

Entre diciembre y febrero, los lineamientos se discutirán en las agrupaciones comunistas y en el resto de la población, en centros de trabajo y en barrios. De cada sesión se levantarán relatorías con objeciones o propuestas, que luego se concentrarán por municipios y provincias. El diario oficial Granma invitó hoy a que cada persona se manifieste sin cortapisas, discrepando si así lo considera y pidió el máximo de transparencia.

Guevara calificó la reforma como una experiencia de salvación del sistema cubano, frente al estrechamiento de la sociedad cuando de ella se apodera el Estado, cuando el Estado se desproporciona y se introduce por todas partes, como un material gelatinoso que todo en el fondo lo pudre. También descartó una eventual restauración capitalista, porque haremos todas las experiencias, pero con el poder en la mano.

Alonso, a su vez, opinó que el reto de la economía sigue siendo para Cuba el reto esencial. Recordó que en la década pasada hubo un paquete de reformas insuficiente, tras el cual sobrevinieron deformaciones en la economía y creció una fuerza de trabajo profesional que, contradictoriamente, se aprovecha poco. La cuestión sería ampliar progresivamente los espacios a la lógica de la justicia social y de la equidad frente a la lógica de la ganancia, sin sacrificarla. Si se sacrifica la ganancia ¿con qué vamos a costear lo otro?

Los lineamientos incluyen el desarrollo de una política cultural, con utilización efectiva de los recursos. Piden convertir en empresas a las instituciones que sea posible, a fin de generar nuevas fuentes de ingresos, así como racionalizar la enseñanza artística.

En su alegato sobre el punto, Graziela Pogolotti afirmó que en la educación y la cultura, la inversión se recupera a mediano y largo plazo en términos de valores intangibles, que se revelan en el crecimiento del sujeto con vistas a sus prácticas laborales concretas, al desarrollo de la conciencia, a la capacidad de asumir una participación responsable, a la afirmación del sentido de pertenencia, fundamento del arraigo identitario en todas sus instancias.