Senadores de PRI, PAN y PRD lamentaron el asesinato del ex gobernador de Colima Jesús Silverio Cavazos Ceballos y llamaron a las autoridades a una pronta investigación del caso. A esta condena se sumó la Secretaría de Gobernación, la dirigencia nacional del PAN y el PRD, así como la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) del PRI. Casi 12 horas después de ocurrido el atentado, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI condenó los hechos, en un escueto comunicado.

El presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Cámara de Diputados, el panista Felipe González, manifestó: el crimen organizado sigue una estrategia de delitos de alto impacto para atemorizar a la ciudadanía, pero este homicidio no debe hacer que cese la persecución de los criminales, y tampoco es momento de cambiar estrategias.

En cambio, los senadores priístas Francisco Arroyo Vieyra y Rogelio Rueda, en entrevistas por separado, instaron al Ejecutivo a modificar su táctica contra el narcotráfico porque es equivocada y tras cuatro años de guerra los resultados son 30 mil muertos, inseguridad y crecimiento de la violencia.

Graco Ramírez, senador del PRD, sostuvo que este hecho no hace sino mostrar la profunda crisis de descomposición que hay en el país, el presidente Calderón debe modificar su estrategia contra la delincuencia, porque ya debe tener claro que es equivocada, además de que las guerras son banderas de la derecha.

En un comunicado, la Secretaría de Gobernación expresó su más enérgica condena por el homicidio del ex gobernador y expresó sus más sentidas condolencias a la familia Cavazos Ceballos y a todos los colimenses.

La dependencia afirmó que por instrucciones del presidente Felipe Calderón, el titular de la dependencia, José Francisco Blake, habló telefónicamente con Mario Anguiano Moreno, mandatario de la entidad, para expresarle la solidaridad y el compromiso del gobierno federal de coadyuvar con las autoridades estatales para esclarecer los hechos.

Rogelio Rueda, senador por Colima, manifestó su consternación por el homicidio del ex mandatario y resaltó que este hecho pone de manifiesto que frente a la delincuencia organizada no hay nadie que pueda sentirse inmune. Pidió que se refuerce la seguridad no sólo de los funcionarios federales y estatales, sino también de los ex gobernadores.

Seguramente en su mandato afectó intereses del narcotráfico, subrayó el priísta, y abundó que debido a esta situación pudiera haberse cometido este crimen, pero cualquier cosa que se pueda decir en relación al ataque es mera especulación, hay que insistir en que se requiere una investigación urgente sobre este caso.

Arroyo Vieyra, por su parte, aseveró que “el Estado protector de la ley está desapareciendo poco a poco, eso es grave, y nadie dice nada. Insisto, desde hace cuatro años se empecina Calderón en seguir una política equivocada contra el narcotráfico, que nunca debió empezar. No vamos a acabar con el narco mientras exista mercado, entonces se debería de atacar éste, no el delito en sí”.

El senador priísta dijo que el titular del Ejecutivo debería de escuchar a los ex presidente Vicente Fox, Ernesto Zedillo, Carlos Salinas, Miguel de la Madrid y todos los que han pasado por Los Pinos y han tenido que lidiar con este flagelo.

En sendos comunicados, PAN, PRD y CNOP reprobaron el atentado y exigieron una investigación pronta y a fondo de lo ocurrido. El ceneopista Emilio Gamboa manifestó su preocupación por los hechos en los que perdió la vida el ex mandatario y los signos de la descomposición social, ante los acontecimientos políticos que vivirá el país en los próximos meses, en referencia a los procesos electorales en varios estados.

La dirigencia priísta, la última en reaccionar, dijo en un escueto comunicado, que el clima de violencia que sacude al país ha cobrado una víctima más.