Editoriales de Clarín y La Nación “hacen pensar” en violencia: canciller argentino
Lunes 22 de noviembre de 2010, p. 30
Buenos Aires, 21 de noviembre. Durante un masivo acto en el Día de la Soberanía, que tuvo fuertes simbolismos políticos, la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner sostuvo ayer que hay que entender la necesidad de la unidad nacional
y convocó a sus compatriotas a despojar nuestras cabezas de las cadenas culturales que durante años nos han impuesto y que son más profundas que un cañonazo, porque nos hacen ver por los intereses de otros y no los de la patria
.
En tanto, el canciller Héctor Timerman dijo hoy que los editoriales de los matutinos Clarín y La Nación hacen pensar
en una promoción de la violencia ante la desesperación
de estos sectores por el reconocimiento popular
a la mandataria y a su esposo, el ex presidente Néstor Kirchner, recientemente fallecido, en un reportaje con la agencia oficial Télam.
Fernández de Kirchner encabezó los actos para conmemorar la Batalla de la Vuelta de Obligado, sobre las costas del río Paraná, ocurrida el 20 de noviembre de 1845, cuando los soldados y el pueblo se enfrentaron a la flota anglofrancesa en un desigual combate, que abrió las puertas a la resistencia nacional.
Es la primera vez que esta fecha es declarada feriado y Fernández de Kirchner sostuvo que era necesario cumplir con esta deuda histórica porque se ocultaron deliberadamente durante dos siglos las luchas contra otros colonialismos que aún subsisten, por ejemplo en las (islas) Malvinas
.
Se refería al enfrentamiento diplomático porque Gran Bretaña no ha cumplido con los acuerdos de descolonización de esas islas argentinas mantenidas como colonias británicas desde 1833. Ahora, violando todos los compromisos internacionales ,Gran Bretaña tiene empresas que exploran petróleo y una base militar en una de las islas.
También recordó en parte de su discurso que entonces “corrían tiempos en los cuales, como en tantos otros de nuestra historia de estos 200 años, potencias extranjeras querían dividir nuestro país y apoderarse de nuestros recursos. Buques de guerra acompañados por buques mercantes –porque en realidad venían en nombre del libre comercio– pretendían transformar nuestro río Paraná en un río internacional y no en lo que es y siempre será, un río de la nación argentina”.
Miles de jóvenes, así como las Madres de Plaza de Mayo y otros organismos sociales y políticos acudieron a este acto, donde estuvieron buques de la armada y la prefectura y en la localidad de San Pedro, a más de 170 kilómetros al noroeste de esta capital, donde se inauguró el monumento a los caídos en esa batalla.
Patria sí, colonia no
fue una de las consignas del acto, en que se aclamó constantemente a Néstor Kirchner y se respaldó a la mandataria.
La presidenta terminó su discurso con la convocatoria a la unidad de los más de 40 millones de compatriotas, y pidió que el 20 de noviembre sea un día símbolo de la unidad nacional, pero también de dignidad y soberanía para defender a la patria
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Por otra parte, la afirmación del canciller Timerman sobre las convocatorias violentas coincide con varios análisis de los periodistas más progresistas del país, quienes advierten una crispación
inusual en la oposición, como se demostró en los últimos días al impedir votar el presupuesto presentado por el gobierno para el año 2011, lo que no se hizo nunca desde el retorno de la democracia en 1983.
Incluso se recordó que votaron presupuestos y leyes por medio de las cuales el gobierno del ex presidente Carlos Menem remató en los años 90 las empresas estatales, destruyó conquistas sociales que habían costado largas luchas e impuso una política exterior dependiente de Estados Unidos.
Además Menem amnistió e indultó a los jerarcas de la pasada dictadura que eran los únicos detenidos, después del voto –también congresional– de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final (1986-87), que establecieron la impunidad para los delitos de lesa humanidad.
“Hoy las editoriales de Joaquín Morales Solá (La Nación) y Eduardo Van der Koy (Clarín) justifican la violencia que se produjo en Diputados y deshumanizan, al mejor estilo fascista, llamando lacra al diputado (Carlos) Kunkel”, declaró Timerman a Télam
Se refería al respaldo casi increíble
de la oposición, incluyendo un sector de la llamada centroizquierda, al exabrupto de la diputada de la derecha peronista Graciela Camaño de Barrionuevo, quien golpeó en la cara a su colega, un hombre de larga trayectoria progresista.
La justificación de esta violencia y de la negativa a votar el presupuesto presidencial muestra a lo que ha llegado la oposición en Argentina, dividida por luchas internas, pero unida cuando desempeña un papel para destruir a un gobierno, y eso lo extiende a golpear a otros gobiernos de la región, que mantienen una idea de unidad que no le gusta a Washington
, señala un análisis local.