Bolivia no signó la declaración de ministros de medio ambiente de la Organización de Estados Americanos (OEA), por considerar que dicha iniciativa pone precio a la naturaleza por medio de los mercados de carbono.

La delegación boliviana, encabezada por la viceministra de Medio Ambiente y Biodiversidad, Cynthia Silva, anunció que el país sudamericano no firmaría la Declaración de Santo Domingo para el Desarrollo Sustentable de las Américas, ya que los servicios que presta la naturaleza no se pueden ni deben valorar en términos monetarios.

Frente a los delegados de la segunda Reunión Interamericana de Ministros y Altas Autoridades de Desarrollo Sostenible de la OEA –realizada del 17 al 19 de noviembre–, la funcionaria aseveró que “los servicios ambientales que prestan los glaciares de los Andes no tienen precio. La selva amazónica no es la sumatoria de una serie de servicios que se pueden aislar y luego sumar en una factura.

“Bolivia se opone a la visión que considera a la Madre Tierra un objeto al que se le puede poner precio, lo que ha llevado a la humanidad a romper el equilibrio con la naturaleza.