La cultura no es un lujo sino una necesidad. Sin ella se desvanece el perfil de una sociedad, y al contrario, con cultura, se vencen muchos de los problemas del país, aseguró el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles.

Uno de los objetivos de la casa de estudios, dijo, es transmitir la relevancia de la cultura para el país. Ella configura buena parte de los rasgos e identidad de una nación, atesora muchos de los valores esenciales de una colectividad, no es un lujo, es una necesidad, aseguró al inaugurar la primera gran feria Internacional de Ajedrez UNAM 2010.

En el acto –realizado en la sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario de la UNAM– y que representa una de las actividades para conmemorar el centenario de la institución, hubo dos invitados de honor: los ex campeones mundiales de ajedrez, los rusos Garry Kasparov y Anatoly Karpov. El primero subrayó que el llamado deporte ciencia tiene un enorme potencial educativo; en tanto que Karpov aseveró que el aprendizaje, lógica, herramientas y tácticas de este juego no sólo se pueden usar en el tablero, sino extenderse a la vida cotidiana.

En su discurso inaugural, Narro refirió que el ajedrez puede verse como algo lúdico, divertido o como un gran pasatiempo. Aunque también los que saben dicen que se trata de un juego o deporte ciencia. Es una práctica enraizada a lo largo de los siglos y que ha avanzado y permanecido con la evolución, el desarrollo y el progreso, se ha convertido en una muestra de la cultura humana.

Narro mencionó que la gran asistencia al acto inaugural no sólo refleja el interés por este deporte, sino que manda un mensaje de solidaridad con la UNAM y un mensaje de apoyo a las distintas expresiones de la cultura nacional, iberoamericana y universal.

Estudiantes de la UNAM durante las partidas que sostuvieron con los maestros del deporte ciencia, Anatoly Karpov y Garry Kasparov, en la Sala NezahualcóyotlFoto Yazmín Ortega Cortés

Posteriormente, en entrevista, el rector insistió en la relevancia de la cultura para la humanidad. No me puedo imaginar un mundo sin poesía, literatura, cine, teatro ni música; en el que no hubiera pintores o escultores.

Agregó que la cultura no sólo la forman las bellas artes, sino también las ideas y cultura populares, ya que todo es parte de la identidad de una sociedad y de una nación.

La gente reconoce en Octavio Paz a uno de los grandes mexicanos, pero también a Pedro Infante. Uno en la literatura, premio Nobel; el otro, un personaje con un arraigo singular, forman parte de la cultura. México no puede entenderse sin esas expresiones y muchas otras más, de la alta cultura y de la cultura popular. Y todo eso requiere impulso, estudio, investigación, rescate, formación y difusión.

Por ello, convocó a apoyar estos rubros y a que los actores políticos muestren más voluntad de apoyo en ese sentido.

Kasparov manifestó su felicidad al ver un auditorio casi lleno. La universidad es el mejor lugar para desarrollar el ajedrez, aquí es donde más profundidad hay. Este juego es cultural, es ciencia y representa un enorme potencial educativo que permite mejorar el sistema de formación.

Karpov sostuvo que el aprendizaje, lógica y tácticas del ajedrez no sólo pueden ser utilizados en el tablero, sino en la vida cotidiana y en los estudios, por lo que exhortó a los universitarios a practicarlo.