El lunes pasado, la ex presidenta del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), Claudia Zavala, entregó al secretario ejecutivo, Bernardo Valle, un oficio en el que advierte que mantener su voto en favor de Carla Humphrey para presidir el organismo lo conduciría a una situación de inestabilidad.

En su escrito afirma que las circunstancias concurrentes en las que emitió su voto por Humphrey en reunión privada el pasado jueves, determinando la mayoría a su favor, han cambiado diametralmente y se ve en la necesidad de cambiar su voto por Gustavo Anzaldo.

Las circunstancias políticas actuales hacen imposible que la que suscribe mantenga el sentido de su voto, pues esto permearía en una posible inestabilidad institucional. Cita un principio en derecho: las manifestaciones de voluntad son vinculantes habida cuenta de las circunstancias concurrentes en el momento de su celebración, esto es, que cualquier alteración sustancial de las mismas puede dar lugar a la modificación de aquella.

Concluye pidiendo a Valle hacer del conocimiento de los integrantes del Consejo General su decisión, pero esto se hizo hasta ayer, horas antes de la sesión en la que Anzaldo protestó como presidente del IEDF.