El ex coordinador de los senadores del PAN, Gustavo Madero, consideró que desde el gobierno federal se pretende influir en el relevo de la dirigencia de Acción Nacional. Dijo que Roberto Gil es apoyado por panistas que ya no son funcionarios porque renunciaron y, ahora, como cualquier panista pueden darle su apoyo al candidato que deseen, pero, advirtió, yo soy el bueno.

En tanto, la coordinadora de la bancada panista en la Cámara de Diputados, Josefina Vázquez Mota, afirmó que con la visita a España del titular de Educación Pública, Alonso Lujambio –quien demandó una deliberación responsable de la política luego de acusar al gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, de convertirse en prototipo del monólogo del espot y la noticia pagada–, el funcionario federal manifestó parte de sus intenciones como aspirante a la Presidencia de la República.

En breve entrevista, indicó: lo respeto como a cualquier otro militante del partido, pero señaló que los motivos para asistir a un foro de debate sobre el futuro político del país es algo que el secretario tendrá que compartir. Yo soy muy respetuosa de la tarea que cada uno éste dispuesto a representar, e insistió en que aún no ha definido su precandidatura.

En conferencia de prensa en el Senado, Madero manifestó que “es la primera vez en la historia del blanquiazul que existen cinco candidatos para ocupar la dirigencia nacional, esto es un buen dato que alienta y refleja el entusiasmo de participar en la contienda”.

El panista dijo que los 381 consejeros y consejeras tendrán un menú de opciones, de perfiles y de propuestas que les permitirán escoger el mejor que necesita Acción Nacional para este momento. Se requiere un dirigente que mantenga la unidad y cercanía con la estructura en todos los estados, con el gobierno y la sociedad.

Cuestionado respecto de que el gobierno federal respalda a Roberto Gil, Madero subrayó: lo apoyan panistas que ya no son funcionarios y que como cualquier otro pueden apoyar a quien deseen; ésa es la riqueza y la pluralidad del PAN. No soy el candidato oficial: soy el bueno, que no les quede la menor duda. Soy una persona comprometida con los ideales del partido, pero no soy el candidato oficial.