Actualmente la soriasis no se considera una enfermedad de la piel, sino sistémica, es decir, asociada a otros padecimientos, señaló Gladys León, directora de la Clínica de Soriasis del Hospital General de México.

La doctora afirmó que 30 por ciento de los nuevos casos son atribuibles a la obesidad y 88 por ciento de los pacientes de la Clínica de Soriasis la padecen o tienen sobrepeso.

También se ha encontrado una relación con problemas articulares y el síndrome metabólico, así como con los riesgos cardiovasculares.

Subrayó que se trata de un padecimiento crónico, no contagioso, susceptible de ser controlado con diversos tratamientos dermatológicos. Se estima que en México de 1 a 2 millones de personas padecen la enfermedad.

La soriasis tiende a ser más severa en varones (dos por cada mujer) y afecta principalmente a adolescentes y adultos jóvenes. En caso de ser severa puede disminuir la actividad productiva.

Impacto sicológico

El impacto de la enfermedad, señaló León, va más allá de los malestares físicos, como la comezón; también conlleva una carga emocional y sicológica, pues deteriora la imagen personal y puede provocar el rechazo social hacia los pacientes.

La dermatóloga apuntó que estudios clínicos revelan que la enfermedad más frecuente que acompaña a la soriasis es la depresión.

En ese sentido, la doctora Alma Martín, del Hospital Siquiátrico Infanil Juan N. Navarro, comentó que es importante que en casos extremos se cuente con la ayuda especializada de un sicólogo.

Señaló que es importante recomendar a los pacientes integrar grupos de ayuda mutua, para expresar lo que sienten y piensan de ellos mismos y de su enfermedad.

Ricardo Navarro, presidente de la Asociación Mexicana contra la Soriasis, informó que en el contexto del Día Mundial de la Soriasis, mañana se llevará a cabo el VII Congreso Nacional de Pacientes con Soriasis y Familiares, en el Centro Médico Nacional Siglo XXI. La entrada es libre.