Un grupo armado asesinó a José Gil Hernández Ramírez, miembro de la Guardia Nacional de Texas, Estados Unidos, cuando se encontraba en Ciudad Juárez, Chihuahua. El mexicano Rafael Ramírez Reza, quien lo acompañaba, falleció también y otro, cuya identidad se desconoce, quedó herido de gravedad.

En un comunicado, la Guardia Nacional de Texas confirmó que Hernández Ramírez, de 21 años de edad y oriundo de El Paso, Texas, formaba parte de uno de sus batallones desde 2007. El soldado de primera clase estaba asignado a los cuarteles generales del tercer batallón del Campo de Artillería 133.

La Fiscalía General del Estado, Zona Norte, informó, a su vez, que a las 15:00 horas del miércoles, pistoleros que viajaban en un automóvil y una motocicleta dispararon contra esas tres personas cuando platicaban fuera de un domicilio de la colonia Revolución Mexicana. Allí, las autoridades localizaron 18 casquillos percutidos de armas calibre 45 y 223.

La dependencia expuso que Hernández Ramírez fue identificado por sus familiares. En un comunicado, la Oficina Federal de Investigaciones informó que el padre de Hernández Ramírez dijo a las autoridades mexicanas que su hijo era integrante de la Guardia Nacional en Texas.

Entrevistado en un canal de televisión de Juárez, un tío del soldado dijo que su sobrino residía en El Paso, Texas. Según un despacho de la agencia Afp, más de 50 ciudadanos de origen estadunidense han sido asesinados en los recientes dos años en Ciudad Juárez.

En Chihuahua capital, sujetos armados irrumpieron en un despacho y levantaron a Mario González Rodríguez, abogado y hermano de Patricia, quien fue procuradora de Justicia durante seis años hasta el 3 de octubre.

En otro orden de cosas, el Congreso de Chihuahua aprobó por unanimidad la inclusión de la figura de prisión vitalicia a secuestradores que asesinen a sus víctimas, extorsionadores y homicidas de policías y periodistas.

La penalidad se aplicará también para los casos de mayor desprecio por la vida humana, como cuando se decapita o mutila a la víctima y se dejan mensajes intimidatorios junto a la misma.

La iniciativa, aprobada ayer, fue enviada por el gobernador César Duarte Jáquez en la primera semana de su administración.

Al conocer la resolución legislativa, el priísta, quien realizaba una gira de trabajo por Ciudad Juárez y Nuevo Casas Grandes (azotadas por bandas de raptores) lanzó una advertencia a los secuestradores y les dio de plazo hasta el próximo lunes para que liberen a sus víctimas o, de lo contrario, a quien se le encuentre culpable de este delito se les aplicará prisión de por vida.

Saldo rojo

Ayer, al menos 31 personas murieron en acciones del crimen organizado y enfrentamientos de fuerzas federales y estatales con presunto sicarios en los estados de México, Durango, Guerrero, Nuevo León, Jalisco, Sonora y Guanajuato.

Entre los occisos figuran Antonio Valdés, dirigente de la Confederación de Trabajadores de México en Acapulco, Guerrero, y líder de comerciantes, quien realizaba campaña en favor del candidato priísta a la gubernatura Manuel Añorve Baños.

También murieron Rubén Castillo, agente municipal de San Nicolás de los Garza, Nuevo León; Pedro Martínez, elemento de la procuraduría de Justicia del estado de México; Daniel Montes, agente de la Secretaría de Seguridad Pública Federal, ultimado en esta última entidad, y Arnulfo Torres, investigador de la Procuraduría de Jalisco.

Por otro lado, familiares del extinto capo Amado Carrillo presentaron una denuncia penal ante la Procuraduría de Justicia de Sinaloa por el rapto de Miguel Ángel Castillo Carrillo, de 15 años, sobrino de El Señor de los Cielos, el pasado viernes, por un grupo armado.

Con información de Notimex