El año pasado aumentó 10 por ciento el número de personas en situación de calle, para ubicarse en tres mil 49, por problemas de desintegración familiar, desempleo, violencia y adicciones, informó el secretario de Desarrollo Social, Martí Batres, y agregó que en una época de crisis prolongada y recesión lo único seguro que tiene la gente son los programas sociales que deben seguir, universalizarse y convertirse en un derecho.

En conferencia de prensa para celebrar el Día Mundial de Rechazo a la Pobreza, que será el día 17, anunció la creación de un banco de la ciudad de México orientado a promover el desarrollo económico y social de los capitalinos, y el impulso de un programa para la conformación de empresas sociales juveniles, pues hoy es dramático que se tengan las tasas más altas de desempleo y de crecimiento de este sector poblacional.

También se plantea ampliar las políticas sociales dirigidas a menores de cinco años, continuar con el programa de mejoramiento barrial en cada uno de los mil 350 barrios y colonias de la capital para mejorar las condiciones en que se encuentran, y poner en operación un modelo de atención a población en situación de calle denominado Casa Taller para la Vida en el albergue de Villa Mujeres, comentó.

Acompañado del director del Instituto de Asistencia e Integración Social (Iasis), César Cravioto, y el vicepresidente del Movimiento Internacional ATD Cuarto Mundo, Marco Antonio Ugarte, informó que el domingo se inaugurará ese programa dirigido en una primera etapa a 30 jóvenes que viven en las calles de Artículo 123, colonia Centro, aunque son 300 puntos identificados donde se concentran, como Tasqueña, La Raza, Guerrero y Zarco.

Es la población más vulnerable, que requiere atención, por lo cual se les dará la oportunidad de que cuenten con alojamiento, aprendan un oficio y tengan una mejor forma de vida mediante un programa de reinserción social, reconociendo sus derechos y encontrando el trato respetuoso las autoridades a fin de alejarse de las adicciones e incorporarse al mercado laboral, argumentó.

Mencionó que con base en el censo que realiza el Iasis, en la ciudad hay 3 mil 49 personas en situación de calle; 83 por ciento son hombres, 200 son menores de 18 años, 300 mayores de 60 y dos mil 500 tienen entre 18 y 59 años de edad, además de que 60 por ciento son originarios de algún estado de la República.

Sin embargo, la imposibilidad de incorporarse al mercado laboral ha provocado que la mitad del universo realice alguna actividad económica precaria, como recoger cartón, papel o latas, o limpiar parabrisas.