El gobierno capitalino tiene proyectada la construcción de un nuevo segundo piso sobre el Anillo Periférico para desahogar la movilidad vehicular en la zona oriente de la ciudad.

Durante su comparecencia ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), el secretario de Obras y Servicios, Fernando Aboitiz, explicó que sólo están a la espera de que avancen los trabajos en la línea 12 del Metro, que correrá de Mixcoac a Tláhuac, para evitar el colapso por las obras.

Este proyecto se sumaría a la autopista urbana, conformada por la supervía poniente y los tramos elevados del Anillo Periférico Norte y Sur.

Aboitiz aseguró que de no llevarse a cabo este conjunto de proyectos las vialidades de la capital colapsarían.

Indicó que la estrategia del gobierno capitalino sí es promover el uso de la bicicleta e inhibir el de los vehículos, pero existe el problema de la temporalidad y la falta de recursos. Para que la ciudad tenga una buena operación del transporte público y la gente decida usarlo se requiere contar por lo menos con 20 metrobuses, con una serie de alternativas.

El problema, agregó, es que para tener 20 líneas de Metrobús van a pasar 20 años, y si dejamos las vialidades tal como están, no podríamos garantizar la movilidad.

El secretario de Obras también aseguró que en el cierre del Bordo Poniente no habrá marcha atrás. Ya hay un acuerdo con el gobierno federal, apuntó, tras señalar que solicitarán a la Asamblea Legislativa 700 millones de pesos adicionales para el manejo de los residuos sólidos y cumplir con este compromiso.

Antes compareció el secretario de Desarrollo Social, Martí Batres, en medio de los embates de los diputados del PRI y del PAN, que criticaron que le quitaran el control en la política social.

La diputada Alicia Téllez cuestionó que lo relegaran de los programas prioritarios del jefe de Gobierno, e inquirió si no respondía a fines políticos-electorales. No se deje, secretario, remató.

Siguió la panista Lía Limón quien declinó dar una calificación a su gestión, pues “su propio jefe ya lo reprobó. Todos sabemos que usted no es su gallo; por ello ha dejado en sus manos sólo los programas que le parecen los menos importantes.

Desde la tribuna, Batres, quien centró su discurso en hacer una comparación de la política social federal y local, consideró que esa percepción sólo podía ser producto de la insidia o de la ignorancia, pues la Sedeso no tiene ningún programa social menos; por el contrario, cada año agrega uno más. Los programas sociales siempre han estado asignados a otras dependencias, puntualizó.