Puebla, Pue., 8 de octubre. Diez personas resultaron heridas cuando integrantes del Sindicato Estatal de Trabajadores de la Educación de Puebla, Independiente y Democrático (SETEPID) retomaron sus oficinas, que estaban ocupadas desde hace cuatro meses por disidentes que de ese modo pretendían que las autoridades laborales desconocieran al secretario general del sindicato, José Uber Romero Ronquillo.

Los profesores utilizaron piedras, palos y bombas molotov contra las oficinas del gremio ubicadas en el centro de esta ciudad.

Por la mañana, unos 800 profesores, la mayoría de la tercera edad, marcharon para exigir a la Secretaría de Educación Pública y a la Secretaría de Gobernación estatal reconocer a Romero Ronquillo como secretario general y respaldar la destitución de los docentes que intentaron removerlo de su cargo en días pasados.

Alrededor de las 18 horas los manifestantes ingresaron al edificio sindical ocupado por disidentes del SETEPID encabezados por la ex dirigente del gremio, Laura Artemisa García Chávez. Rompieron ventanas y puertas y lanzaron dos bombas molotov que hirieron a por lo menos tres maestros. Los profesores agredieron también a periodistas, camarógrafos y fotógrafos que cubrían el los hechos y amenazaron al reportero de La Jornada de Oriente si continuaba éste con su labor.

Tras retomar las instalaciones, Romero Ronquillo advirtió que las personas non gratas (los disidentes) serán expulsadas del gremio.

Dos horas después de la trifulca, policías municipales y granaderos del estado arribaron a las instalaciones gremiales acompañados por un agente del Ministerio Público.