El kayakista juvenil Francisco Javier Flores confía en asegurar su calidad en el Campeonato Panamericano de la especialidad, que se inicia este jueves en Cuemanco. Sobre todo buscar lo que tanto le hace falta a México: avanzar en el deporte, en la educación, como en tantos aspectos que deben mejorarse, dijo el atleta de 16 años, a quien se le ha complicado continuar sus estudios por carecer de un sistema que respalde de maneradefinitiva a los deportistas de alto rendimiento.

Como la mayoría de los kayakistas o canoístas, Flores Huenosta nació al lado de un canal. Creció en Xochimilco y está orgulloso de haber ayudado a sus padres a acarrear el material con el que construyeron su casa, lo que hacía junto con su hermano Carlos Alberto, a bordo de la embarcación con la que más tarde empezaría a entrenar, hace seis años.

No siempre fue el primero en las competencias, pero hoy se precia de haber sumado dos títulos en la Olimpiada Nacional 2010, ser considerado para la selección y estar listo para lograr el boleto a los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 en alguna de las pruebas en las que participará este fin de semana: K1 500 metros; K4 200 y K4 1000.

“Es la primera vez que participo en un Panamericano. Estoy muy orgulloso y estará difícil la competencia porque la mayoría de los países viene con sus mejores equipos. Pero para eso nos estamos preparando, para enfrentarnos con lo mejor de lo mejor.

Esperemos que a todos nos vaya bien, expresó el canoísta, aunque comentó que para la cuarteta que integra con jóvenes de Michoacán y de la UNAM será la primera vez que estén juntos y han entrenado poco la velocidad.

Sin embargo, el atleta que empezó a competir en nacionales a los 12 años, se mostró entusiasmado por la experiencia y lo que le falta trabajar. Todo habrá valido la pena, pues las exigencias del entrenamiento y las competencias lo llevaron a solicitar dos permisos en el bachillerato, pero como agotó el límite, su única opción fue el sistema abierto.

Voy presentando exámenes cada mes, quiero terminar, pero ha sido complicado. En canotaje la mayoría ya no estudia. Mi hermano se ha concentrado más en la escuela, y aunque le va bien, no está seleccionado. Yo estoy aquí ahora y sé que podemos llegar lejos, planteó el joven.