Protección Civil de Tabasco consideró que en este momento se vive el punto más crítico de la contingencia, tras informar que hasta la tarde de ayer ya habían sido desalojadas 14 mil 970 personas de 10 comunidades del municipio de Centro –con cabecera en Villahermosa– entre ellas las rancherías Plátano y Cacao, González, Anacleto Canabal y Lázaro Cárdenas, ubicadas a orillas del río Carrizal.

Antes, la Comisión Nacional del Agua informó que a partir de la noche de este sábado la presa Peñitas, en el Alto Grijalva, aumentará sus desfogues a 2 mil 400 metros cúbicos por segundo –cien más de lo que se extraía– ante la entrada a la región del frente frío 4, lo que hará crecer el nivel del río Carrizal. Este volumen supera 2 mil 300 metros cúbicos históricos alcanzados en 2007, cuando la entidad vivió la peor inundación en los 50 años recientes.

En Anacleto Canabal algunas familias que viven en casas de dos plantas prefieren refugiarse arriba, pues tenemos varios aparatos eléctricos y otros muebles que nos pueden robar, dijo María Sánchez. Su vecina Bélgica Jiménez aseguraba sus cosas en la parte alta de su vivienda y junto con su esposo y dos hijos se fueron a refugiar con familiares que viven en áreas seguras.

En Oaxaca, la mayoría de comunidades zapotecas y chinantecas de los distritos de Ixtlán de Juárez y Villa Alta, región de la Sierra Norte, están en emergencia ante la escasez de víveres a causa del cierre de caminos provocados por los derrumbes y desgajamientos de cerros.

En representación de los munícipes, el edil electo de Guelatao de Juárez, Antonio del Águila García Ramírez, expuso que los pobladores no pueden salir de las comunidades desde hace un mes y el auxilio gubernamental llega muy lento.

Derrumbes en las comunidades de Tilapa, Tapayoltepec y Tepeyac, en el municipio de Malinaltepec, Guerrero, dañaron seis viviendas, informó la Subsecretaría de Protección Civil.