pesar del estado permanente de reconstrucción y los miles de socavones y grúas que inundan la ciudad, Madrid se ha situado por primera vez entre las 10 ciudades del mundo con mejor calidad de vida. La urbe española entra así en una selecta lista de metrópolis encabezadas por Munich y en la que también figuran París, Copenhague, Melbourne y Tokio.

La revista británica Monocle es una referencia para situar y evaluar el nivel de la calidad de vida de las grandes ciudades, al realizar anualmente un estudio basado en la experiencia de sus propios enviados así como de los viajeros que las visitan. Desde hace unos años publica una estadística en la que se evalúa la calidad de vida de las ciudades en función de sus actividades culturales, limpieza, aceptación social y los proyectos urbanísticos más innovadores y vanguardistas, entre los que destacan el fomento y utilización de energías limpias y proyectos sostenibles.

Según los responsables del estudio, Madrid escaló tres posiciones en la lista en sólo un año debido a la enorme aceptación de los viajeros, pero también a una serie de proyectos, para algunos polémicos, como el plan Madrid Río, en el que se pretende recuperar para la ciudad el cauce del río Manzaneras con una transformación profunda de ese entorno, además de crear y sostener una serie de áreas verdes enmarcadas en la llamada Operación Chamartín.

En la codiciada lista sólo figuran cuatro ciudades de más de tres millones de habitantes, además de Madrid, Tokio, París y Melbourne. Al parecer en el estudio no tuvieron demasiada incidencia los numerosos problemas que tiene la ciudad, como la falta de una alternativa vial para los millones de usuarios de bicicletas como transporte público, el deterioro del servicio de limpieza por la reducción del presupuesto a causa de la crisis o la enorme deuda que ha contraído el ayuntamiento en los años recientes. Lejos de eso, el estudio tilda a Madrid de metrópoli vibrante. Quizá acoge muy bien al turista.

Armando G. Tejeda, corresponsal