Publican libro que acusa a musulmanes ortodoxos de causar violencia y desintegración
Se puede hablar de ello sin levantar sospechas de xenofobia
, afirma Angela Merkel
Domingo 5 de septiembre de 2010, p. 21
Berlín, 4 de septiembre. La publicación de un libro sobre la política migratoria alemana, que acusa a los musulmanes ortodoxos de causar problemas de violencia y desintegración social, llevó a la jefa de gobierno Angela Merkel a convocar a un debate basado en hechos, sin antipatías ni resentimientos
, en un país de 80 millones de habitantes, donde una de cada cinco personas es de origen extranjero.
Es un gran problema y podemos hablar de ello abiertamente, sin levantar sospechas de xenofobia
, afirmó la canciller en una entrevista que publica este domingo Bild Am Sonntag, que hoy difundió un adelanto.
La polémica sobre migrantes islamitas se desató el lunes, cuando las librerías pusieron a la venta el libro Alemania se acaba a sí misma, escrito por Thilo Sarrazin, miembro de la junta directiva del banco central, el Bundesbank, y militante del Partido Socialdemócrata, oposición a la gobernante y conservadora Unión Demócrata Cristiana.
Sarrazin escribió que los migrantes turcos y árabes de fe musulmana son menos inteligentes y producen más perjuicios que beneficios a Alemania, donde hay 4 millones de islamitas, la mayoría de ascendencia turca.
Sus afirmaciones causaron mayor polémica cuando Bild am Sonntag, en su edición del domingo 29 de agosto, publicó una entrevista en la que el funcionario sostuvo que todos los judíos comparten los mismos genes
.
Parte del espectro político y periodístico rechazó la percepción de Sarrazin, pero algunos ponderaron sus errores y aciertos, como por ejemplo el líder del Partido Socialdemócrata, Sigmar Gabriel, quien afirmó que está a la vista mucho de lo que describe
.
El ministro de Defensa, Karl Theodor zu Guttemberg, consideró que Sarrazin sobrepasó las fronteras de la provocación
, mientras su compañero en el gabinete de Merkel, Guido Westerwelle, responsable de la cartera diplomática, aseveró que declaraciones que alimenten racismo o antisemitismo no tienen lugar en nuestro discurso político
.
Merkel, en un esfuerzo por dar equilibrio a la discusión, expresó que los migrantes deben prepararse para vivir en nuestra sociedad, aceptando las leyes sin excepciones
, al tiempo que los alemanes necesitan tolerancia
y estar listos para dar la bienvenida y respetar
a los extranjeros.