Chilpancingo, Gro., 4 de septiembre. El secretario de Salud de Guerrero, Antonio Jaimes Herrera, denunció que debido a violencia que impera en la entidad, médicos y enfermeras que laboran en hospitales de diversas localidades ya no se quieren presentar a sus centros de trabajo, como el nosocomio del municipio de Zapotitlán Tablas, donde cinco especialistas ya no regresaron a trabajar.

En entrevista, reconoció que se requieren más de cien especialistas para cubrir las necesidades básicas en los hospitales de Guerrero, no sólo en la región de La Montaña, sino en Chilpancingo y Acapulco.

El año pasado, debido a la falta de recursos suficientes del Seguro Popular, y de la aportación solidaria del estado, no llegaron 600 millones de pesos, de los cuales 400 eran para obras y 200 millones para contratar personal, precisó.

Jaimes Herrera mencionó que existen graves problemas de inseguridad en los hospitales comunitarios de los municipios de Metlatónoc, Huamuxtitlán, Zapotitlán Tablas, Coyuca de Benítez y Teloloapan.

Explicó que en el caso de Zapotitlán Tablas la situación se complicó, debido a que un síndico fue baleado y trasladado al hospital, pero como no se tenía el equipo adecuado, fue llevado a Tlapa, donde falleció. Entonces, el médico –un especialista–, fue amenazado de muerte y se le cambió de lugar”.

Agregó que hace dos semanas, la directora del hospital de Zapotitlán, cuyo nombre no citó por seguridad, se dirigía con otro médico a comer en una zona aledaña al nosocomio y fueron agredidos por un sujeto que viajaban en un vehículo, lo que no denunciaron porque los amenazó.

A partir de esos acontecimientos se fueron los cinco especialistas de Zapotitlán y en esta zona de la Montaña se requiere un mínimo de 25.