El edificio en Donceles será vendido; en la nueva sede no hay lugar
El acuerdo era cesar operaciones el próximo 20 de noviembre
Sábado 4 de septiembre de 2010, p. 34
A pesar del compromiso del perredista Carlos Navarrete, autoridades administrativas del Senado decidieron ayer cerrar la guardería que desde hace 15 años opera en instalaciones de esa Cámara y ordenaron el desalojo de las madres que se presentaron a recoger a sus niños al local de Donceles 14.
Un grupo de empleadas, acompañadas por el dirigente del Sindicato de Trabajadores del Senado, Saúl Pérez Peñaloza, denunció que incluso el personal de resguardo parlamentario impidió en un primer momento que se llevaran a los menores, a fin de obligarlas a presentarse en la oficina del director general de Recursos Humanos, Arturo García de León Pereyra.
El funcionario quería verlas para notificarles que ayer fue el último día de operación del Centro de Desarrollo Infantil (Cendi), ya que comenzará a desmantelarse de inmediato, y les advirtió que no intenten llevar el lunes a sus hijos.
Impiden protesta
Cuando las trabajadoras regresaron por sus hijos e intentaron llevar a cabo una protesta dentro del edificio de Donceles, fueron desalojadas por personal de resguardo.
Pérez Peñaloza dijo que acudirán al nuevo presidente del Senado, Manlio Fabio Beltrones Rivera, con el propósito de que asuma el compromiso que formuló su antecesor, Carlos Navarrete, de que el Cendi se mantendría en ese lugar hasta el 20 de noviembre.
El problema surgió debido a que ese inmueble será vendido y les notificaron que en la nueva sede senatorial –que se construye en Reforma e Insurgentes– no hay sitio para la guardería.
Las autoridades del Senado proponen a las trabajadoras el pago de esa prestación o la subrogación del servicio, opción que rechazan, luego de las malas experiencias de dichas estancias en manos de particulares.
El dirigente sindical insistió en que demandarán que se respete el compromiso de Navarrete con las afectadas y se busquen alternativas, entre ellas establecer el Cendi en un edificio ubicado en la calle Madrid, ya que ese inmueble no se venderá.
Tanto el dirigente como algunas de las afectadas consideraron que es inadmisible que no se respeten sus derechos laborales, e insistieron en que confían en que el actual presidente del Senado resuelva el problema.
Acordaron presentarse el próximo lunes con sus hijos a la hora acostumbrada de entrada a la guardería.